MI OTRO YO

MI OTRO YO

Está mi persona calmada y tierna, disfrutando de algún amigo, y a ratos, tirado en abierta pierna. Cantando al amor y a nuestra tierra materna, elogiando al Sol y a la bondad eterna. Tengo el humor para reírme de mí mismo, poseo la dignidad de odiar el cinismo. Mi única ideología, es la verdad y las buenas maneras, castigo al malhechor, por sus mentiras y corrupción y lo destierro a las eras. La chaqueta la cambio cuando hace frío, cuando la dignidad se difumina acabando en el río. Poseo mi otro yo como todo el mundo. La diferencia es que yo lo saco, y lo políticamente correcto, se lo dejo al tío Edmundo. No comprendo a las personas que se dejan engañar una y mil veces, que siguen votando a los mismos, mientras los bolsillos de estos se llenan de nueces. Nueces de oro robadas de nuestros esfuerzos, dejando nuestros bolsillos vacíos y quedando nuestra economía como verdaderos escuerzos. No hago más que escuchar el discurso de replicantes, las palabras de sus amos falsas, que a mí me resultan indignantes. Perdonando a Barrabás, necesitaremos mil años para encontrar un gobierno justo, que gobierne con dignidad y no nos esté mancillando de susto en susto.

Angel Márquez Díaz