Esta maldita costumbre
de soñarte cada noche,
tú como siempre en tu línea
y yo soltando derroche.
Esta maldita costumbre
que sólo comete errores,
tropezando con los besos
que no me dan sensaciones.
Esta maldita costumbre
que sale sólo en caliente,
de aferrarme a una locura
de un corazón inocente.
Esta maldita costumbre
que tengo cuando me lleno,
de darlo todo de golpe
sin guardarme lo que debo.
Esta maldita costumbre
quizás pudo haber vencido,
a la razón de mi alma
y a mi corazón dolido.
Esta maldita costumbre…
ya se empieza a acostumbrar,
a tenerme cuando quiere
y a quitarme libertad.
Esta maldita costumbre
me hizo esclava de tu ser,
y cuando empiezo a olvidarte
vuelvo a soñarte otra vez.
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