Un recuerdo a la vez…

¿Y si el miedo que tengo de ser yo misma es porque soy diferente a los que no desean ser ellos mismos?

Salí de casa esa noche sintiendo como el frío atravesaba mi piel y se me instalaba en los huesos, no tenía mucho con que cubrirme; el invierno se mostró crudo pero era lo que conocía mi cuerpo. Esa sensación de «necesidad» es un pilar de lo que soy, un cimiento forjado de hierro que difícilmente lo blandea una ventisca.

Tenía 14 años…

«Si eres incapaz de distinguir un alma noble a tu lado contaminado estás del círculo de seres que te has rodeado»

Estuve cubierta de tantas inseguridades. Miedo al mañana al presente. La sensación de que aunque el mundo sea inmenso pocos lo pueden conquistar. Me sentía pequeña…

«Una persona puede influir con simples palabras para derrumbar tu amor propio o hacerte ver el mundo con un cristal de otro color»

Comenzaba el otoño. 

Esperando con impaciencia la clase de filosofía, me identificaba con frases que sumergían mi mente llevándola a niveles excitantes. Y el profesor se apasionada hablando de esos grandes escritos y escritores, se desplazaba armoniosamente de orilla a orilla del salón. Ese día se plantó enfrente de todos en clase, hizo una pausa; comenzó a dirigirse hacia mi concentrándose en mirar mi rostro, con un paso lento… después de segundos de silencio brotaron de sus labios vibraciones altas para mi alma: «Y la belleza existe en varias formas, algunas desbordan al grado de admirarse fácilmente y son comunes de encontrar… pero toparse con ojos hermosos es un deleite, detectar su belleza por lo que expresa su alma eso, eso es ser afortunado».

Tenía 15 años…

«Un paso puede hacerte caer o subir un escalón»

Fueron días envueltos en neblina que cobijaban mi corazón, todo mi ser. La soledad puede ser tan cruel y orillarte a desear no vivir más. No encontrar un abrazo para refugiarte. Después de todo, si estás sólo nadie extrañará tu ausencia. El sentimiento de oscuridad en tu vida puede llegar a cubrir todo tu cielo aún y cuando el sol esté en todo su resplandor.

Tenía 19 años…

«Una persona que te regale un momento de su vida y que te haga saber que confía en ti, ésta te hará ver el ser único que eres. Todos tenemos la oportunidad ser esa persona para alguien más»

Terminaron las vacaciones de verano. La butaca vacía a mi lado, fue el eterno recordatorio que tu ausencia no era temporal. El tiempo no encontraba sentido sin ti. No habría nadie más que llenara ese hueco en mi vida, mas que una amiga mas que una hermana, un ángel que me protegió de la soledad. Pero tu vida tomó un camino muy distante al mío. Sabía que serías feliz la vida te reservaba cosas hermosas, porque si no las merecías tu, entonces ¿quién en el mundo?. Y con todo mi ser, deseé que cada uno de tus sueños se hicieran realidad…

Tenía 16 años…

«Si puedes ver a un ángel extender sus alas, entonces ya eres uno de ellos»

Dedicado a todas aquellas personas que han sido parte de mi vida, gracias…