la iglesia es a dios lo que la escuela es a la psicopedagogia, por que limitar el conocimiento a tan solo cuatro paredes, por que no ver el aprendizaje en todo y cada uno de los actos humanos, como bien dice Baruch de Spinoza refiriéndose a dios «Deja ya de estar rezando y dándote golpes en el pecho! Lo que quiero que hagas es que salgas al mundo a disfrutar de tu vida.

Quiero que goces, que cantes, que te diviertas y que disfrutes de todo lo que he hecho para ti.

¡Deja ya de ir a esos templos lúgubres, obscuros y fríos que tú mismo construiste y que dices que son mi casa.

Mi casa está en las montañas, en los bosques, los ríos, los lagos, las playas. Ahí es en donde vivo y ahí expreso mi amor por ti».
la psicopedagogia y el aprendizaje no están solo en la escuela están en cualquiera que requiera y tenga la inquietud de seguir aprendiendo, salgamos al mundo y hagamos nuestro el aprendizaje sin miedo a innovar, sin miedo a fracasar cuestionando todo lo que nos parezca cuestionable, mejorando lo que creemos defectuoso, derribemos de una vez por todas las barreras impuestas por la escuela y aprendamos jugando, bailando, gritando.

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