!Estelita, que linda que estás!

!Estelita, que linda que estás!

– Cruchs, cruchs, cruchs, !mmm, estas tortillas si tienen rica la cascarita Estelia!

!ah!, ya se que te gustan así Manuel, por eso te las hago así a vos –

Todas las mañanas muy a las cinco de la mañana doña Estelia ya tenia servido el desayuno de su marido, era la abuelita más alcahueta de toda esa generación de chavalos y la esposa más sumisa que yo conocí, vivía prácticamente para complacer a los demás, ni ella sabía si hacía bien o mal pero tenía que servirles decía.

La radio que don Manuel sintonizaba se llama La Corporación y en ella se enviaban saludos mañaneros a través del programa «Canto con saludo», había una en especial que enfurecía al abuelo, deben perdonarlo, pues aunque conocía las letras y oraciones para entablar conversaciones orales y escritas, no tenía la mente abierta para discernir – !buenos días estimados y estimadas! ha llegado la hora más alegre de la mañanita, y tenemos saludos especiales para una mujer demasiado bella y exquisita, tanto que su enamorado secreto le dedica la siguiente canción, que esta bella dama la disfrute: venga, muchachos!

– » Estelita que linda que está,
Estelita podría con usted conversar,
Estelita si usted tiene novio
En la vida siempre hay solución

Cada vez que miro sus ojos veo lo linda que es
Y si miro su lindo cuerpo empiezo a desfallecer
Es un lindo sueño la vida donde hay pena y cantar
Estelita si usted me quiere podríamos conversar

Estelita que linda que está,
Estelita podría con usted conversar
Estelita si usted tiene novio
En la vida siempre hay solución
En la vida siempre hay solución

Cada vez que miro sus ojos veo lo linda que es
Y si miro su lindo cuerpo empiezo a desfallecer
Es un lindo sueño la vida donde hay pena y cantar
Estelita si ud. me quiere podríamos conversar -»

– Este era el cuete como decía don Manuel de las mañanitas de vez en cuando y enfurecido pero controlado le gritaba desde el corredor a su mujer – :

«!Estelia! quien es ese que te canta? jodido que irrespeto! no se quien es ese jodido que se atreve a cantarte muy oscuro y le vale que yo este aquí en la casa de remate!»

Por supuesto doña Estelia con paciencia y amor le explicaba una y otra vez:

«Pero Manuel, nadie niño, nadie, es una canción que se llama Estelita y no es que me la dediquen a mi hombre, calmate niño no seas burro niño»

– Una vez a la semana era esta batalla entre los viejitos, jajajajaja, amena y divertida para sus nietos e hijos pero para nada divertida para la pobre doña Estelia – .

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