El observar es ingenioso, y él lo sabia, reconocemos mucho de este joven, hoy todos lo recuerdan, des-afortunadamente no hay mucho tiempo para él, estrechemos palabras, ya que este es su momento, tomemos este lapso para retomar su delicado vivir:

Conocido por su manera tosca de llevar la vida, no me malentiendan no se metía en situaciones turbias ni mucho menos buscaba placeres pasajeros, lo que lo trae aquí el día de hoy, bueno… No tenia… como llamarlo: «vida», cuando lo veías encontrabas a un ente, mas aun no quería a nadie, por lo que pude ver, el quería moverse al ritmo de algo que no conocía, llevaba sus relaciones amorosas como un personaje torpe, su capacidad de sentir era hermosa, pero no podía integrar las emociones de otros.

Un desesperante caso para todo el que lo rodeaba, como cabe suponer, tenía miedo, cuando conoció a este hombre que vivía en el faro cerca de su quinta, mucho cambio, un hombre algo mayor que le enseño mucho, en ciertas ocasiones los vi juntos, la admiración nació en sus ojos, reconoció palabras y actitudes que por si solo no se permitía ver, yo particularmente estaba muy contento por él, sonreía con verdad e incluso consiguió una pareja estable.

Fue una noche tonta que lo llevo a una reacción indebida, su chica conocía muy bien las andanzas con su fiel amigo, sus conclusiones no fueron las mas acertadas, y alteraron al joven de manera bestial, lo insulto y por ultimo le dijo que se largue.

Fue al faro con las ansias de aliviar sus penas con algo de conversación, alterado y confundido encontró a su amigo echado en el camarote, lo que continúa en una amena conversación se torno en alcohol y pesares de ebrios, los amigos se quedaron hasta altas horas de la noche bebiendo, la hora de la despedida llego, estrecharon la mano y se citaron al dia siguiente, con la intención de explicar la situación a su pareja.

De camino a casa paro a orinar un par de veces, se podría decir que era un borracho escandaloso, tomo el callejón que daba a la plaza antes de llegar a su quinta, tercera vez paró a vaciar la vejiga, cuando reconoció una voz, una voz hostil que lo dejo entre carcajadas, una banda que él conocía se encontraba delante suyo, el hermano de su novia parecía histérico, y una patada acabo sus risas, cinco personas gritaban a voz en cuello insultos, fueron acompañados de golpes, pudo escuchar algunos que eran sobre lo poco hombre que era, la falta de respeto a su hermana y finalmente sobre homosexuales, estos últimos embrutecieron mas a la pandilla, después de eso el joven no escucho algo mas.

Este recuerdo queda en mi, lo conocí desde pequeño y ahora mismo me causa un gran pesar nombrar hechos tan fatídicos, no hay manera de alivianar esta historia, sobre todo porque conocerlo me hace observar con dolor, toca hacer un memorable funeral y no olvidar a este buen joven que no encontró mucho en su camino.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS