Cuando pienso en ti

Viajo a donde estas

Quizás, más allá

De mi ilusión…

Ladrón:

Canta hermosa luna, mi canción favorita “Lo ajeno”, pues mientras tú me recitas un cuento, un canto o un secreto yo te escucho y te ignoro para sentir como me golpea la brisa mientras la observo tras su ventanal y le robo su intimidad, toda su humedad y su total tranquilidad.

Continua hermosa luna y no te detengas, pues tú como yo sabemos que la ocasión hace al ladrón y es así como me atrevo a robar sus pertenencias, sus penas, sus glorias e insultos.

La caricia de sus bofetadas, la excitación de sus rasguños y sus dolorosos golpes de palabras me hacen entender que no soy un ladrón novato, sino un profesional en mi trabajo.

No me traiciones hermosa luna, pues yo conozco tus secretos, deseos y tus intimidades con la brisa y el alba, es por eso que te ofrezco mi silencio a cambio del tuyo.

Luna:

¡¡Ladrón!!…

Yo no soy otro más de tus estúpidos empleado y sabes que no tienes derecho a cambiar mi vida, pues tú sabes que mi silencio es mucho más valioso que el tuyo.

No me vuelvas a amenazar… debido a tus insultosas palabras la próxima vez te iré a traicionar.

Ladrón:

Hermosa luna, ya no grites…

Hermosa luna, no te ofendas…

Luna en crescenso, tan solo era una broma…

Y me atrevo a solicitar… tú sigue con tu trabajo y yo con el mio, al cual le agrego…

Perdón.

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