EL INSTANTE MENOS PENSADO

EL INSTANTE MENOS PENSADO

Vanina Vitale

19/02/2020

Entre la espera y la desesperación hay una brecha llamada tiempo. Si bien no todo está en nuestras manos, durante esos minutos somos artífices de nuestro presente. Podemos tomar miles de decisiones, o ninguna. Podemos llorar mil veces, o ninguna. Podemos herir a mil personas, o a ninguna. Después de esta simplista reflexión, es sano saber que muchos han forjado su felicidad en medio de ese interpas. Y también es de público conocimiento que “todo depende del cristal con el que se mire”. Ser feliz “durante” es el desafío que hoy tenemos. Sería algo así como; no morir en el intento, no arrebatar la comida al fuego o no servir demasiado pronto el té. Dominar las pausas es una de las tareas japonesas por excelencia, pero la exportaron hace tiempo y tú también puedes aplicarla. Parafraseando a un grande del rock argentino, no te olvides que “Vivir sólo cuesta vida”. La felicidad debe ser ahora, ni antes ni después, sino se atrofia. Ni temprano ni tarde, sino se diluye. Ni lenta ni ligera, sino no se disfruta. El tiempo muerto entre una persona y otra, debe estar más vivo que nunca.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS