NUESTRO GOLDEN LLAMADO BLAKE

NUESTRO GOLDEN LLAMADO BLAKE

Maricela Fer

09/10/2019

uena la alarma, ya amaneció, hace frio, parece que el invierno volvió y ya estamos en el mes de primavera, no me quiero levantar, pero allí esta, es Blake mirándome, lo llamo y se me acerca despacio, ya no puede caminar, está enfermo, ya no es un bebe, tiene 12 años.

Cuantos años nos viene acompañando recuerdo el día que uno de mis enanos me pidió tener una mascota, todos querían eso, pero me aterraba el laberinto en la casa, el desorden, cosas que después pasaron a segundo lugar pero que en ese momento si se tomaron en cuenta,

Il babo no quería, el resto me gritaba que sí, Diego era el más animado, sus ojitos le brillaban y Luis Alonso apoyaba a su hermanito y me decía que, si los quería, le cumpla el deseo, así que lo pensé y decidí darles una sorpresa.

Una tarde al salir del trabajo decidí bajar en la veterinaria, busque una mascota, la más bonita y allí estaba, echadito, con mirada triste, solo gemía, me acerque, lo mire y le dije: “Quieres venir a mi casita?, ¿ser parte de mi familia? realmente fue increíble, me miro y movio su colita, apenas tenía dos meses de nacido, simplemente me enamore de él.

Pedí sacarlo de su jaula, lo compro le dije al dueño y quiero una casita, la mejor, quiero una linda cama, que sea azul con rojo para que sea un color alegre, mientras decía esto, lo tenía cargado y él se acurrucaba en mi pecho, era tan tierno, era un hermoso Golden Retriever color piel, simplemente hermoso.

Prendí mi auto y todo el tiempo manejé sosteniéndolo en mis faldas y le comentaba lo feliz que se pondrían mis hijos, èl solo escuchaba.

legue a casa, Il babo abrió la puerta, me miro y le susurre diciéndole no decir nada, pregunte por nuestros hijos, “están en el estudio” respondió, no digas nada, es una sorpresa, le pedí saque la casita y camita del auto, se sonrió y en silencio subí al mezanine.

Diego jugaba en la computador y Luis Alonso corrió a recibirme, me dio un beso y le hice la señal de silencio, me acerque a Diego y lo bese, estaba concentrado en su juego, baje de mis brazos a la mascotita y lo puse a sus pies, la mascota se hecho en sus pies y Diego al sentir algo se asustó, lo miro y grito: Es Blake, ya tengo mi perrito, es Blake, fue lindo verlo sonreír y Luis Alonso abrazando a su hermanito.

l babo me dijo, “ahora pues” “yo no se” me sonreí y le dije: “Somos una familia y juntos lo vamos a lograr” y desde allí estamos juntos hasta hoy.

A lo largo del camino de la vida llegó Draco, su mascota de Luis Alonso, Blake se puso bravo no quería que nadie le quite su reino pero le dije que era su hermanito y poco a poco lo logro.

Llegó a vivir con nosotros la mami Juani y Blake la adoraba, era la nonna más linda, pero un día ella partió y Blake lloro mucho.

Hemos crecido y pasado cosas juntos, surgiendo, logrando objetivos, sufriendo y saliendo adelante pero hoy nos levantamos, todos pues estamos tristes, Blake enfermo, tengo que llevarlo al médico, siempre ha sido tan tierno y verlo hoy sufrir no lo podemos soportar, le salieron dos tumores y no sabemos qué va a pasar.

Lo llevo en el auto, Blake ladra, pareciera que tiene miedo de irse de casita, le hablo al oído yle digo que lo traeré de regreso y que confíe en mi, son tantos recuerdos con él, no puedo soportar el llanto, cuanto dolor siento, siempre a nuestro lado, acompañándonos en el dolor como cuando la mami Juani murió, o cuando también murió el papi Manuel, o en las alegrías como cuando llegaba Santa en las noches de Navidad o comer la torta de tu cumpleaños o correr para quitarle su pelotita, o cuando es Año Nuevo y suenan los juegos artificiales y se asustaba Draco y él lo protegía, o sus rabietas cuando la otra mascota se ponía a jugar con los chicos, o cuando Diego le enseño a abrir o cerrar una puerta, o cuando llego de compras y corre para ayudarme y cargar las bolsas o cuando se come la comida de Draco o cuando regamos el jardín y le encanta le bañe con la manguera en verano, Son tantos recuerdos, tantos episodios, sé que no soportaremos su ausencia.

He llegado a la veterinaria, le digo que baje, que todo saldrá bien, que yo lo esperare, que confie y que Dios lo protegerá.

Saludo al doctor, me mira y me ve llorosa, me dice que este tranquila que todo saldrá bien, se que asi será, beso a Bake y lo veo partir.

Es una angustia terrible, debo ir a recogerlo, el doctor nos dice que salio todo bien, estamos contentos pero cuando llegamos nos dice que sangro mucho y que había que analizar el tumor.

El maligno me grita por teléfono Diego, “se va a morir, Blake se va a morir”, no quiero mamá”, Luis Alonso llora, il Babo también, no es justo, quiero que este en mi graduación, quiero que llegue a navidad.

Que terrible sentir esto, es una personita tan linda y sabe lo que pasa, Blake solo esta echadito y Diego no quiere salir de su cuarto y me digo: “Tengo que hacer algo”, le pido a Dios me dé las palabras adecuadas, me acerco a Blake y le digo al oído: “No tengas miedo Blake, Dios esta contigo, asi es, tu tienes que partir primero que nosotros porque la mami Juani te necesita, esta solita, tienes que acompañarla para que preparen el camno y luego llegamos nosotros, tu estate tranquilo, Dios y la Mami Juani te están esperando y están felices, pero cuando te vayas, vas a venir como angel y nos vas a cuidar y siempre vamos a estar juntos”, Blake me miro y se que entendio, se paro y desde alli hasta el dia de hoy cada vez que llegamos a pesar de que sabemos le duele, se para y sale a jugar con su pelota.

Somos felices de tener a Blake, Dios escucha, el doctor dijo que sería un milagro dure hasta Navidad y ya va mes y medio de la operación y el está bien, a pesar de que hace frio y le ponemos su estufa para que se caliente, a pesar de que no puede subir las escaleras y le hemos construido una rampa, a pesar de que no debe agitarse, el sigue luchando porque al igual que nosotros, Blake nos ama, nos pide con su patita que lo acariciemos, Draco incluso le lame su herida, lo deja que se coma su comida y es feliz. Dios quiera lo logremos, sé que mis hijos ya lo están asimilando, Lucho dice que lo que debemos es no permitir que sufra y eso estamos haciendo.

La vida de un animalito que lo único que hace es dar amor, merece un espacio al cielo y sé que él ya lo tiene. Ya lo bendije, tomo su agua bendita y sé que la fe que tenemos ayuda.

TE AMAMOS BLAKE, GRACIAS POR TU COMPAÑÌA, POR ESA MIRADA QUE NOS REGALAS DÌA A DIA, POR CUIDARNOS, GRACIAS DIOS POR HABERLO PUESTO EN NUESTRO CAMINO.

Con cariño para mis hijos Diego y Luis Alonso. Maricela Fernàndez Ñ.

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