Si nuestras almas son

enlazadas por un “que”,

tus ojos sujetan los míos,

nuestros labios se complementan directamente,

sacando mis mejores atributos.

El caso en el cual

el enlace está dentro de nosotros

especificaré con claridad

la explicación de tu beldad inexplicable.

¡Oh, surgida de la espuma!

causa de divinas peleas

en una guerra por ti

ni me vence Ares.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS