Belleza inmoral

Nos quedamos a solas, me miras y en la profundidad de tu pupila puedo ver tus ideas más oscuras. Tus pupilas se expanden y se dilatan, caigo dentro. Me atrapas en tu juego, me muerdo el labio y sonríes, a la par que alzas una ceja y ladeas la cabeza,mis piernas tiemblan.

Estas arriba y sujetas mis muñecas con la presión exacta para que me resista, y así apretar un poquito más, con más dureza. La piel caliente y suave de tus costados entre mis muslos, estos que te aprietan tal cual presa que no quieren dejar escapar.

Me liberas una mano y mis dedos recorren tus formas, en un intento de apretar el máximo de tu carne para ahogar las ganas, y un suspiro casi como un gemido se escapa. Tapas mi boca con tus manos rudas y aterciopeladas, apretando las comisuras, casi privando de aire aquello que más amas.

Un dedo que se introduce en mi boca semicerrada, deseo lamerlo, chuparlo, saborearlo lento en una suave danza.Siento tu fuego violeta, amarillo, naranja… que explota , estalla. Me coges del pelo, y me haces tan tuya que soy incapaz de resistirme retorcida y hacia tu pecho apretada.

Una mano que se alza, y brilla en la oscura noche como el filo de una navaja, repentino,sonoro, tu mano azota mi nalga. Silencio. Gemidos. Un ardor que me recorre el cuerpo, ese dolor que se vuelve dulce y nunca amarga. Necesito más, de la dureza de tu mano pintando de color rojo mi cuerpo, el sonido de ese filo que deja libre y creativo nuestro lado primitivo

Rodeas con tus dos manos mi cuello y aprietas, a la par que penetras mi más sagrado vergel, embestidas fuertes, salvajes, rítmicas y sudorosas, casi me tienes sin aire, y siento que te encanta verme así, frágil, ahogada y dominada. Y eso aún me excita más a mí.

Así que desatada de deseo te ruego, muérdeme. Siento como tus dientes aprietan mi cuello, afilados, fríos y mojados, dejando surcos en mi piel. Nada me enciende más que un acto casi animal, inmoral y lacerante. Te miro, y en tus pupilas dilatadas reconozco esa energía tan poderosa atractiva y dominante

Me estremezco, soy tuya así que magullas mi cuerpo en este acto carnal, puro ritual sexualde belleza sin igual, enloquezco;una y otra vez a ti te entrego cada uno de mis alientos. En una marea constante, cíclica y sin final. Pasas tu lengua por mi entrepierna, haciendo un camino imaginario que une la parte interna de mis dos muslos

Provocando terremotos que hacen que tiemblen mis cimientos , piérdete en esa parte central, en esa flor de loto que tiene tanto que ofrecer a tu boca de coral, y saborea mi esencia, mi locura, hasta mi energía vital. Una energía que me recorre la columna vertebral, que sube asciende, explota en colores formando un fractal.

Vente conmigo a este lugar, derrama en mi todo tu potencial infinito, llenándome hasta el alma de ti, como seres enloquecidos, pues solo de esta forma incívica, sin leyes casi animal, es cuando te siento tan mío. Y cuando todo acabe, cae, cae a mi lado de nuevo, déjame abrazar, besar y agradecer la belleza de lo efímero, antes de volver a empezar y perdernos en otro suspiro de nuevo .