Se presentaron tus demonios, incomprensibles
en los momentos menos esperados
provocadores, carentes de amor y decencia.
Se cayeron las caretas y quedaron las cicatrices del amor todas descubiertas
No, no podía sanarte…
te abres las entrañas
te llenas de palabras y silencios-
Malheridos, malinterpretados y malolientes interpretaciones.
Mi espíritu no puede con tus furias,
con tus desahogos crueles y tus ufanadas desidias
soy como la muerte, caigo en cuenta de la vida
y elijo la realidad
Mi voluntad nada puede hacer
pues es con ella, la tuya, que puede un nosotros
y hoy está ninguna.
Se disolvió la amabilidad
no se ríe la sonrisa
La intención se rinde cobarde, disconforme y deformada.
Los amigos se perdieron, la amistad se olvidó.
Implosionan las razones y no hay eco en esta caverna de piedras duras y frías
herida por el tiempo, camino ilesa
Me remueve la conciencia al ver con claridad serena
¿Dónde apareció el engaño?
¿Cómo pudimos vernos entre velos que parecían amor?
¿Que pasó con tu claridad?
¿Que pasó con la mía?
Acostumbrada a las pesadillas raras
déjame decirte tu eres algo así.
Al final cuando te acostumbras a soñar cosas feas
te despiertas de otra forma.
Ya los miedos te visten y tú te muestras indiferente
Ya los miedos te previenen y estas al tanto, distraída de vida
Ya los miedos no te miran y tú no les temes
Ya los miedos poco avisan
Por eso prefiero haber creído con ilusión
Sin miedo a la pasión
Pero…que ciega ésta, la pasión
Que mentira larga el amigo
Que pena la malversación de los tesoros.
De hecho contribuyo a tu felicidad
Desapareciendo de ti
Pues yo, ya no te conozco.
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