Tres hermanas

Tres hermanas

Treserres

01/08/2019

«A la rueda, rueda. De pan y canela. Dame un besito

Y vete para la escuela. Si no quieres ir… Acuéstate a dormir…»

Tres pequeñas hermanas: entre rondas, risas, bromas, complicidades, travesuras, sueños e historias de grandes personajes, se juraron lealtad.

Cada una sabía lo que quería ser cuando fuera grande:

-¡Yo seré actriz! – decía Juana la del medio entre risa picarona.

-¡Yo seré policía! – gritaba Lucy la mayor. Con la seguridad que la caracterizaba al hablar.

-¡Yo seré como «El caminante» y viajaré por todo el mundo! – proclamaba Vicky la menor.


Las tardes eran cortas para las tres soñadoras. No importaba el clima, si llovía o hacía calor; cada una alimentaba su personaje de acuerdo a la edad y sus series favoritas. Los años iban lentos para la expectativa que se alojaba en el pensamiento.

«Aquellos años maravillosos» -son el himno de una exclamación unísona- que deja entrever una leve nostalgia.


Lucy, era la primera en levantarse cada día para arreglar su copete al estilo llamado «Alf» .

Juana, vivió varias historias de amor al estilo «La Bella y la Bestia«. Y pues no había que adivinar quien era la Bella y quien era la Bestia entre el acumulo de pretendientes que tenía.

Vicky… la niña… dueña de la exploración. Fueron varios los descansos en la sala de espera de la dirección del colegio. Pero no había porque preocuparse, siempre resultaba «salvada por la campana«.


A sus 80 años, Juana tiene «Fama» entre sus amigos. Su alegría espontánea divierte a todos en las fiestas.

Lucy a sus 75, es una gran amiga!. Todos acuden a su habilidades de Inspector Gadget cuando de algo quieren saber.

Vicky a sus 65 se siente como MacGyver . Todos la buscan cuando de tecnología e imposibles se trata.


Tres grandes hermanas: sentadas en sus perezosas, recuerdan una infancia cargada de emociones. Piensan en «El curioso caso de Benjamin Button»

-Quizás sea mejor nacer siendo viejo y morir siendo niño- dice Lucy con melancolía.

-Hoy no estaríamos recordando lo que soñamos y no pudimos ser- Exclama Vicky.

-Moriríamos felices en medio de la inocencia – añade Juana.


«Gracias a la vida que me ha dado tanto

Me ha dado la risa y me ha dado el llanto

Así yo distingo dicha de quebranto

Los dos materiales, que forman mi canto

Y el canto de…»

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS