Voy a cometer un asesinato, ese niño no pasa de hoy.
Mientras subo al espejo del baño a encontrarme con el, pienso en lo feliz que me hízo.
-hola mi yo de ocho años, hoy vamos a realizar nuestro último truco, te pido que te vayas a Nunca jamás, mandaré unas bicis de Rappi llenas de dulces para ti, las hadas y los gnomos.
Lleva tu caja de juguetes que yo ire luego, tengo antes que hacer algo, pero a la noche iré para que contemos historias y asemos masmelos…
Le pedí que se llevara la caja de juguetes porque no quiero dejar ni un recuerdo de el. Lo iba a matar olvidandolo para siempre en Nunca jamás.
Una vez allí mi yo de 8, dos aviones rocían liquid papper sobre el cielo de Nunca jamás, despues cuatro aviones y así, se fue poniendo todo en blanco.
Los mensajeros de Rappi lograron escapar antes de que todo fuera borrado.
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