CARTA A MI JOVEN VIEJA

CARTA DE MI JOVEN VIEJA

Me han tomado de pies y manos, peor aún, ya no me sirve la boca, me la han cocido.

Primero tomaron mi pie izquierdo, después el otro, cuando me di cuenta mis manos también eran cautivas, ¡que gracioso, no me di cuenta! porque tenía vendado los ojos y anestesiado el cuerpo.

Todo comenzó al momento de mi nacimiento, me inyectaron una sustancia, me dijeron que era por mi salud, pero después le dijeron a mamá que ya estaba mi registro. ¡¿Registro de qué?! Me preguntaba. Claro con aquel registro todo empezó, pero eso no fue todo, después mi madre me llevo a que me pusieran una tinta muy extraña en el dedo anular y en la plana del pie, qué extraño, justo en el dedo que conecta con las venas del corazón y la planta del pie, donde se encuentran mis raíces, el lugar donde escucho la voz de mi naturaleza.

Me llamaron ciudadana, me volvieron una de ellos y ni si quiera me lo preguntaron y todo porque así lo demandaban, me frustraron, me impidieron mostrar mi sexualidad, abusaron de mí, me usaron, me ultrajaron con su absurdo patriarcado, me golpearon desde el alma y después me tiraron porque ya no le servía al país.

Si quieres un consejo integrante con ellos, finge ser una de ellos, cuando estés dentro y te crean igual has explotar la bomba que llevas dentro, pero una cosa si te advierto, que el fingir te lleva a actuar y el actuar te hará desear quedarte, porque es más fácil vivir en un mundo donde no pasa nada que vivir en uno que no existe, ten mucho cuidado porque te querrán quitar la bomba que llevas dentro, te abrirán el cerebro sin que te des cuenta, ahí donde se encuentran los cables de la bomba, la apagaran y después te abrirán el corazón, la extraerán y serás uno ellos. Procura no mirar la pantalla gigante que contempla todo el mundo; porque en es esta la que te distraerá y no te darás cuenta de cuando te quitaron la bella bomba.

Y no tengas miedo cuando dejes explotar esa bomba, 7 más explotaran contigo….