Yo la quise como a muy pocas,
Y como a muy pocas
Hasta el día de hoy
Sigo recordando y extrañando…
Ella fué de las contadas
Que con sus encantos,
Su belleza, simpleza,
Su simpatía y su mirar de cristal
Ha mi alma y mi corazón
Supo arribar y por asalto tomar
Para llevárselos consigo
Y no devolvermelos jamás.
Yo la amé; quizás, tal vez;
Y como a muy pocas mi yo,
Sin dudar, se lo brinde.
De mi obtuvo todo lo que se propuso;
De mi obtuvo todo lo que se le puede
A un ser humano pedir;
Y éste, por propia voluntad entregar.
Aunque, la vida y el destino,
A veces, son mucho más caprichosos
Que uno mismo, y así como
Suele brindar, también, te suelen quitar;
Y, a pesar que, yo sin dudar
Ni exigir todo lo haya dado,
Alguien con algo se ha quedado
Y en su capricho, la vida sabía
Por decisión suya, al final,
Nos haya, para siempre, separado.
Yo la quise y, tal vez, amado;
Y como a muy pocas
Hasta el día de hoy
La sigo recordando y continuó extrañando
Aún cuando ya haga muchos años
Que no la tenga a mi lado;
Aún así, la sigo trayendo a mí,
Como ése dulce recuerdo de haber sabido
Querer, amar y valorar,
Como creo jamás animarme a volverlo a hacer.
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