Antes, durante y después del cáncer.

¿Cómo vemos la vida? Tal vez como algo seguro, seguros de que hay algún mañana. Yo así la veía.

Era un chavo que hizo ejercicio desde muy pequeño, me encantaba jugar futbol, subirme a la bici e irme a pasear con la familia o con los amigos por la colonia.

No era de muy buenas calificaciones en el colegio pero pasaba las materias, mis padres siempre apoyándome en todo.

Fui creciendo y empezaban las fiestas con los amigos, el alcohol, el cigarro, las desveladas y las peleas con los papás por llegar tarde o por no avisar. Decidí ponerme las pilas al 100% y me metí en las carreras deportivas de 5 y 10km hasta llegar a correr un maratón a los 18 años. También hacía duatlones y triatlones y me encantaba la competencia, siempre fui muy competitivo contra los demás pero más hacia mis tiempos, siempre quería tener mejores tiempos y entrenaba muy duro.

Después de un largo tiempo participando en las carreras y entrenando casi a diario, decidí regresar un poco al desmadre con los amigos, alcohol y cigarro. De repente volvía a hacer ejercicio pero no dejaba a un lado los vicios.

En el año 2014 muere mi abuelo paterno, cuya muerte fue super dolorosa para mi por que yo ya tenía edad de saber cuanto iba a extrañar a ese señor viejito que siempre nos recibía con una hermosa sonrisa en su casa. Ese mismo año mis padres se divorcian y cada quien agarra su camino. Ese año para mi fue terrible por esos 2 acontecimientos, pero pues la vida sigue. Hubo muchas peleas con mamá y con papá por que no aceptaba el divorcio. Le echaba la culpa a uno y luego al otro. Después hubo problemas económicos, no muy graves pero problemas. Agarraba trabajos con familiares y amigos pero todo ese dinero lo usaba para irme de antro el fin de semana con los amigos y fue lo único que hacia. Trabajaba en un agencia de viajes en donde afortunadamente en el 2016 tuve la oportunidad de viajar a Cancún por 3 semanas a estar con los grupos a los cuales les había vendido los viajes. Conocí gente increíble en ese viaje lleno de alcohol y fiestas. No lo voy a negar, me divertí muchísimo y ha sido de las mejores experiencias de mi vida, pero si, fue muy cansado vivir de fiesta por 3 semanas. Una de las personas que conocí en ese viaje era de Cuernavaca pero vivía y estudiaba en Puebla, y nos hicimos muy buenos amigos y me invito a pasar unos días a puebla a principios de agosto. Les estoy hablando que el viaje a Cancún fue a finales de mayo principios de junio.

El plan era el siguiente: Estar en Puebla una semana y luego irme a la Ciudad de México por 2 semanas por que allá estaría mi hermana empezando a estudiar en la UNAM, me iría con ella a apoyarla en cualquier cosa que llegara a necesitar. En Julio de ese año, un mes antes de ese viaje, me entero que mi mamá se quería ir a vivir a México con mi hermana y mi papá se quería ir a trabajar a Monterrey, es ahí cuando pienso «¿Para qué carajos me regreso a Torreón a estar yo solo?» y fue cuando aproveché el viaje a puebla para buscar trabajo y un departamento en donde pueda vivir. Las fechas quedaban perfectas por que a principios de agosto pagaban las comisiones de los viajes de Cancún y con ese dinero podría solventar mis gastos de 2-3 semanas y buscar trabajo y departamento.

Llegué a Puebla el 7 de agosto del 2016 y para el día 28 de agosto yo ya estaba empezando a trabajar. Durante ese tiempo que busqué el trabajo conocí a una chava increíble, que sin conocerme me dio hospedaje, un lugar donde sentarme a comer y donde me podía bañar. Empezamos a salir, nos enamoramos y fuimos novios. Viajes, fiestas, turistear, escalar montañas, cenas románticas, mucho sexo y mucho amor, locamente enamorados en uno del otro. Claro, altas y bajas de vez en cuando pero creo que la mayoría del tiempo eran altas. Incluso hasta organizamos una fiesta para hacer nuestro compromiso de estar juntos por siempre, no nos comprometimos de dar anillo y eso, pero fue una fiesta muy bonita en donde muchos de nuestros mejores amigos estuvieron presentes y pasándola muy bien.

Pasa el tiempo y llega el 2018, habíamos pasado navidad en Torreón con mi familia, que la amaban con todo el corazón y ya era parte de la familia, y para año nuevo nos fuimos a Hulbert, Oklahoma también con mi familia, pasamos unos días con mucho frío, -17 grados centígrados. Las cervezas bien heladas y el calor de la familia, unos días increíbles. 2018, Todo parecía venir super bien, propósitos muy buenos y una actitud dispuesta a cumplirlos todos.

En febrero retomé el ejercicio y empecé a entrenar para el duatlón de Cholula que era el 8 de abril. Entrené un poco pero los resultados fueron buenos. Recuerdo terminar la competencia e irme a desayunar, y después a descansar. Esa noche dormimos en casa de la mamá de la que en ese momento era mi novia, yo sumamente cansado caí en un profundo sueño. La mañana siguiente desperté con una pequeña «bolita» brotando de mi axila izquierda, no le di importancia, pues pensé que era como una bolita de grasa o un absceso por el sudor de la competencia, o que se habían cerrado los poros de la axila y el sudor no había salido e infinidad de cosas que me puse a pensar. Le llamé a mis papás para platicarles sobre la carrera y sobre esa pequeña bolita que estaba saliendo de mi axila. Me dijeron que me fuera al seguro social a que me revisaran, les hice caso y fui.

¿Qué me dijeron en el seguro social? «Puede ser un absceso, tome estas pastillas y si no se desinflama vuelve a venir» Pues a la semana volví a ir con la bolita, pensando que era un absceso, cada vez mas grande y fea. Me aumentaron la dosis del medicamento y nada mas.

El fin de semana del 13, 14 y 15 de abril nos fuimos a pasar el fin de semana a Cuernavaca, habíamos organizado una carne asada en casa de uno de los amigos. Yo, como buen norteño que se sabe defender pues obviamente fui el que prendió el carbón y les preparé la carne y algunos chiles jalapeños envueltos con tocino, los famosos jalapeño poppers.

De estar tanto tiempo pegado al asador y el calor que hacía hizo que ese absceso empezara a sangrar un poco, me dio un poco de miedo, pero por otro lado sentí un poco de alivio en que ya me iban a exprimir ese absceso y ya quedaría listo para poder continuar con mi vida normal por que la verdad si me sentía muy incomodo. Regresamos a puebla ese domingo e inmediatamente me fui a urgencias del seguro social donde sin anestesia me empezaron a literalmente agujerar la axila donde estaba ese absceso y ¿qué creen? No salió absolutamente nada y me pidieron que regresara al día siguiente con el médico familiar para que me trasladaran a un hospital y me pudieran operar. Eso hice, regrese a primera hora del día siguiente y me atendieron y me dieron una hoja donde decía que me atendieran de urgencia. Les hable a mis padres y a mi novia de ese entonces, con la noticia de que pues me tenían que internar para poderme operar. Mis padres viven en estados unidos y mi novia estaba en clases en la universidad, saliendo se fue inmediatamente a verme y a estar conmigo para cualquier cosa.

¿Recuerdan el sismo del 19 de septiembre del 2017? Pues uno de los hospitales del IMSS en Puebla cerro por que estaba seriamente dañado, por lo que había muchísima gente en ese hospital al cual fui trasladado, estuve 36 horas sentado en una silla de metal, sin dormir y sin que me atendieran, únicamente me habían puesto suero, ni de comer me daban por que supuestamente ya me iban a operar, me harté y tenía mucha hambre y sed por lo que pedí mi alta voluntaria, ya siendo miércoles 18 de abril a medio día, recordemos que yo ingresé al hospital a las 12:00 pm del día lunes 16 de abril. Al pedir mi alta regresé con el médico familiar muy enojado por que no me atendían y a mi me urgía que me removieran lo que sea que haya sido que tenía saliendo de mi axila.

Hablaba yo muy estresado con mis papás, que ya no aguantaba la desesperación de que no me podían atender ni hacer nada, hasta que un amigo de mi mamá de Torreón resulto conocer al director de ese hospital donde yo había pasado las 36 horas sin que me hicieran nada. Me pasaron su contacto e inmediatamente agendamos una cita, lo fui a ver y le enseñé de lo que se trataba mi problema y que urgía que me removieran esa cosa de mi axila. En verdad era algo muy asqueroso, mi axila se veía completamente destruida y desagradable, bueno, no es como que las axilas sean muy agradables que digamos pero ustedes me entienden. Cuando el me ve mi axila me dice «A mi me salen esas cosas en las nalgas y yo me las quito solo en el baño de mi casa con un espejo» es imposible olvidar esas palabras por que me hizo sentir como si yo fuera un cobarde y que no aguantaba lo que me estaba pasando… a lo que le contesté: «Entonces quíteme esto ahorita, ya no lo aguanto». Me mando a buscar a otra doctora para que me dijera a donde ir y todo un desfile por el hospital. Hasta que encontré a esta doctora y me revisa y me dice que mi diagnostico es un ganglio axilar infartado e infectado, ni puta idea lo que me acababa de decir esa doctora con sus 5 practicantes a un lado. Me dice que me vaya al otro hospital del seguro que estaba en el centro de la ciudad y que preguntara por un tal doctor Monroy.

Llego a ese hospital y después de otro desfile en otro hospital, encuentro al doctor Monroy y me dice que regrese al día siguiente por que ya se había acabado su turno y él era el único en ese maldito hospital que me podía agendar mi cita para cirugía. Ahí va Arturo al día siguiente desde muy temprano, sin cita, sin nada, más que una axila abierta y sangrando. Entro a la consulta y le platico todo el desfile que ya había recorrido y le muestro mi axila a lo que me dice que lo espere afuera unos 10 minutos. Pasando los 10 minutos me llama y me dice «cuando fue la ultima vez que se bañó?» Yo, sacadísimo de pedo, con miedo a contestar algo mal pues le contesto que esa mañana me había bañado. Seguía sin entender la pregunta… me dice «me refiero a que los que no se bañan tienen mucha suerte, le acabo de conseguir lugar para operarlo el jueves 26 de abril». Sentí un alivio inmenso dentro de mi y muy feliz le agradecí la atención y me retiré a mi casa a descansar.

Llegó el día de la operación, mi novia y yo desde las 7:00 am en la sala de espera, nerviosos y emocionados por que ya iba a terminar todo el desfile en hospitales, sin saber que era apenas el comienzo.

Todo un éxito la operación, salgo y mi novia, una tía, mi cuñada y mi suegra ahí al pendiente de que yo estuviera bien. Regresé al departamento a descansar y estuve acostado todo el día.

Días después de la operación vino mi madre de visitar para verme y que viera que yo estaba bien. Estamos hablando a principios de mayo, y ella cumple años el 8 de mayo y día de las madres el 10. El día 7 de mayo, ella ya de regreso en estados unidos me hablan del seguro diciéndome que mis estudios de patología ya estaba listos. Salgo del departamento muy aliviado, en el camino prendo mi cigarro, disfrutando de mi cigarro y de buena música en el camino. Al llegar al seguro tiro mi cigarro y entro a donde me habían comentado que pasara a recoger los estudios. El doctor ya no estaba, y la secretaria fue la que me entregó mis estudios. Los leo y obviamente no entendí nada, le mandé fotografía a mi novia para que viera lo que me habían entregado y mientras lo veía decidí llamarle a un muy buen amigo a punto de graduarse de medicina y le leí todo lo que decía la hoja hasta llegar a donde decía diagnostico: LINFOMA NO HODGKIN DIFUSO, MORFOLOGICAMENTE CONSISTENTE CON LINFOMA DE CELULAS GRANDES ANAPLASICO.

Yo no entendí nada de lo que acababa de leerle a mi amigo, él me contesta con un «¿Dónde estás?» me asusté y me pregunta «¿estas sentado?» no pude mas del susto y le dije que ya me dijera que era lo que me habían quitado y fue ahí cuando mi mundo se vino abajo, «tienes cáncer» me dijo. Me quede en shock, no lo creía, vi la cajetilla de cigarros y los aventé por la ventana del carro que aún seguía estacionado y le digo gracias y colgué la llamada. Lo primero que hice fue hablarle a mi novia y ¿qué creen? ella ya sabía lo que tenía por que de igual manera, una de sus mejores amigas estudiando medicina fue la que le dijo que su novio tenia cáncer en los ganglios. Me contesta diciéndome que todo iba a estar bien que ella iba a estar conmigo en todo momento y yo no paraba de llorar, mi cabeza dando vueltas y vueltas pensando pendejada y media. Después de hablar un rato con ella, yo seguía estacionado y era el momento de hablarle a mis papás, nadie lo podía creer, era 7 de mayo y mi mamá cumplía años al día siguiente, ¿qué clase de regalo era ese? decirle a tu mamá que su hijo mayor tiene cáncer. Eso aproximadamente a las 2 de la tarde, inmediatamente compró su vuelo para regresar a México y después volar a torreón, nos vimos en el aeropuerto de México a las 6 de la mañana, lloramos y la felicité por su cumpleaños. Volamos a torreón e inmediatamente nos fuimos a ver a los doctores y hacer mas estudios y una segunda opinión y tomografías y un sin fin de cosas.

El día jueves 17 de mayo del 2018 fuimos mi novia y yo al estadio de futbol de torreón por que jugaban el partido de ida contra el Toluca, me puso muy de buenas ver a mi equipo ganar ese partido, por un momento olvidé totalmente por lo que estaba pasando o estaba a punto de empezar a pasar. Al día siguiente a las 7 de la mañana yo ya estaba en el seguro formado para estudios de sangre y así poder recibir mi primer quimioterapia.

No podía con el miedo, los nervios, ¿qué es una quimioterapia? ¿cómo es una quimioterapia? ¿duele? ¿cuánto dura? Mi novia todo buscaba en internet. Muchas preguntas me estaban atacando en ese momento, me tranquilizaba que estaba mi familia y mi novia en la sala de afuera esperando a que yo saliera. A las 2:30 de la tarde termina el primer tratamiento y me pregunta la enfermera que si quería que le llamaran a mis familiares para que me apoyaran a salir y le contesté que no, yo salía solo, lo que pensé fue que si me veían salir solo, de pie y fuerte eso también los animaría a ellos y así fue, salí y me vieron y salieron corriendo a abrazarme y me llevaron a casa a descansar y comer.

¿Hay algo positivo dentro de que me haya dado cáncer? Claro que si, sin pensarlo. Mis papás se volvieron a hablar con respeto y cariño, viendo por mi salud, la familia por parte de mi papá se volvió a hablar con la de mi mamá, toda la familia unida.

Estuve en la sala de quimio recibiendo medicamento por 4 horas y media. Al llegar a casa me sentía bien, pude comer bien y terminando de comer llegaron todos mis amigos a visitarme y darme ánimos. Estuvimos platicando mi novia, mis amigos, mis familiares y yo por un buen rato hasta que llegó un momento en donde ya no aguantaba el calor, mi cabeza explotaba, mareos, nauseas y les pedí que se fueran. Nos quedamos en el cuarto mi mamá, mi novia y yo, tenía frio pero también mucho calor, no soportaba la luz, el ruido, ganas de vomitar, podía oler todo y la mayoría de los olores me daban asco. Fue la primer noche de muchas que estaban por venir sintiéndome de esa manera. Pude dormir bien, a un lado mi novia, de hecho, siempre estuvo a un lado mío, en cada paso. La mañana siguiente fue igual, muchos mareos y nauseas y ganas de no hacer absolutamente nada mas que estar tirado descansando, y así fue por varios días, acostado descansando, recibiendo pocas visitas por que me sentía muy mal y no quería ver a nadie, ni que hubiera ruido en la casa. Solo se me antojaba comer nieve y ya, acostado viendo películas o alguna serie.

Hubo muchísimas personas que llegaban y recomendaban el comer esto, tomar lo otro, no comas esto, no comas lo otro y un sin fin de remedios caseros para todo el malestar que tenía. Incluso conocí a muchas personas que también habían tenido cáncer y lo vencieron, pero algo que no me fusto de eso fue que me decían que su caso había estado peor y que muchas operaciones y bla bla bla. A mi no me importaba si su cáncer había estado más cabron que el mío, lo que a mi me importaba saber era lo que habían hecho después de vencer el cáncer. ¿A quien inspiraron? ¿en qué apoyaron a la sociedad? eso era lo que a mi me importaba saber, no si lo operaron 2 veces mas que a mi o que si su caso era extremo o no. Eso para mi era pura mierda, y si no hiciste nada después del cáncer, ¿de qué te sirvió superarlo?

Regresemos a unos días antes de la primer quimioterapia, primer estudio de tomografía, afortunadamente limpio de la axila pero un pequeño nódulo en el pulmón derecho, el día de la quimio, el doctor la revisó y dijo que probablemente era una bolita de grasa.

Pasaba el tiempo, yo vivía en puebla y viajaba a torreón a recibir mis tratamientos, cada 21 días yo recibía quimioterapia, regresaba a puebla a estar con mi novia y algunas veces ella me acompañaba a torreón al tratamiento. Ya llevaba 4 quimioterapias y era momento de hacerme otra tomografía para ver como iba funcionando el medicamento dentro de mi. Vaya sorpresa cuando el doctor revisa la tomografía el mismo día donde yo iba a recibir mi 5to ciclo de tratamiento, ese nódulo pulmonar ya no esta, y pregunto ¿Qué chingados significa eso? pues efectivamente, yo llegué en etapa 1 y al ver esa segunda tomografía el doctor me dice «lo siento, estabas en etapa 4 y te tenemos que aumentar el número de quimioterapias». ¿De qué se trata esto? pensé, ¿Por qué si me habían dicho que iban a ser 6 quimios, ahora me dicen que mejor 8? Enojado, triste, desesperado, totalmente agüitado, ya no quería mas quimios, estaba harto de viajar, de estudios, de sentirme mal, de no poder llevar mi vida normal a como la llevaba haciendo. Totalmente desanimado y con lágrimas cayendo de mi rostro entré a la sala de quimio a recibir el 5to tratamiento. Regresé a casa triste, y sin ganas de seguir pero pues lo tenía que hacer por mi y por mi familia y todas esas personas que me rodeaban y me amaban. Al final pues lo bueno fue que ese nódulo del pulmón ya no estaba.

Tuve la oportunidad de viajar y conocer Acapulco con la familia de mi novia, junto con una amiga de su familia que también estaba pasando por tratamientos de quimioterapia y radiaciones, aprendí mucho de ella y le agradezco que siempre estaba al pendiente de mi situación. Un viaje increíble, disfrutando de la playa, la arena y un poco del sol. También tuve la oportunidad de viajar a playa del Carmen y Cancún con mi familia, todos los años es ese viaje pero yo tenía mucho que no iba pero ese año acepté ir por que me lo merecía, merecía descansar un rato en la playa y estar con la familia.

Casi nunca vomitaba con las quimios, pero después de recibir la noticia de que serían 8 en lugar de 6, me tumbó mucho emocionalmente y creo que hizo que las quimios las sintiera cada vez mas fuertes. No lleve un proceso psicológico durante el proceso y no supe manejar muchas emociones ni sentimientos, ocasionando muchos problemas y discusiones con la familia y con mi novia, ella me platicaba cosas que sentía que estaban pasando en la relación y yo hacía menos es problemas, ocasionándole tristeza y que se sintiera que no me importaba ella ni sus sentimientos.

Llegamos a la 7ma quimioterapia, 24 de septiembre, 2 días antes de mi cumpleaños 24, recibí la quimio ese lunes y el martes volé a Puebla para poder pasar mi cumpleaños con ella y con su familia. Todo estuvo excelente, se empezó el proyecto de SIEMPRE FUERTE, pulseras de silicón color verde limón que representaba el cáncer del cual yo había sido diagnosticado. Cada pulsera se vendía en 50 pesos y la ganancia iba ser donado a una fundación que lucha contra el cáncer infantil, hice un video y se hizo viral unos días en torreón y la gente apoyo muchísimo. Llegando así a la última quimioterapia el 15 de octubre, mismo día en que se termino la relación con mi novia por muchas discusiones. Yo estaba muy metido en el tema de las pulseras, entrevistas para el programa local, programas en vivo etc.

Esa última quimioterapia ya casi ni la sentí, estaba muy emocionado de que al final había terminado todo ese largo proceso. A los pocos días regreso a puebla y el departamento donde vivíamos mi novia y yo, prácticamente vacío, sin energía, sin sus muebles, sin su ropa, sin ella. Caí en una depresión horrible, bajé mas de peso por la depresión que por las quimioterapias, ¿dónde está mi compañera de vida? me preguntaba, ya no está, se acabó el cáncer pero el cáncer y no saber manejar emociones acabó con la relación.

Varias idas al psicólogo de la fundación a la que apoyamos con la causa de las pulseras me apoyaron a salir adelante, a salir de ese hoyo en el que estaba muy metido. Me mudé por que el vivir en ese departamento yo solo me traía muchos recuerdos y no era bueno para mi.

Los últimos meses he conocido gente increíble, gente que me ha apoyado a salir adelante, y que me inspiran mucho a hacer cosas que la verdad, nunca antes había pensado hacer.

¿Cómo veo la vida ahorita? La veo completamente con otros ojos, estamos aquí para ser felices y para disfrutar, no creo que todos tengamos una misión en el mundo, pero yo me puse mi propia misión, apoyar e inspirar a la gente para que ellos también dejen huella en el mundo, pero huella de amor, de inspiración, de luchar por conquistar sus más grandes sueños, de cumplir todos sus retos. Disfruto de cada día al 100% por que a lo mejor mañana llega alguna otra enfermedad, o tal vez la misma, nadie lo sabe, así que ¿por qué carajos no vivir cada día al 100? Quiero ser luz para los otros, que pueda iluminar el camino de los que tal vez ya no saben por donde ir, o se encuentran un poco desubicados. La vida es hermosa, pero hay que saberla aprovechar, hay que amarnos y respetarnos por que si no nos damos amor propio no podemos entregarle amor a alguien mas, si no nos respetamos nosotros, no vamos a poder respetar a los demás y hasta incluso puede haber alguien en nuestras vidas que esté pasando por encima de nosotros y nosotros ni en cuenta por que como no nos respetamos, dejamos que cualquier nos este pisoteando.

Esto va dedicado a todas las personas que actualmente están luchando contra esta enfermedad, las únicas palabras que les puedo decir de todo corazón es que sigan confiando, que le sigan echando ganas, hay que aceptar la enfermedad para que nuestro cuerpo acepte el medicamento que estamos recibiendo. Ánimo carajo, claro que se puede.