No puedo

Capitulo-5

-Disculpa que pare, esta parte de la historia sigue siendo muy dura para mí.

– No se preocupe señor Dylan, tome un respiro si es necesario.

(Dylan mira fijamente a Sara, cuando al ulisono le brota una pequeña lágrima que le recorre todo el rostro hasta precipitarse al suelo.)

– Señor Dylan ¿Se encuentra usted bien?

– Si por supuesto, no se preocupe.

(El entrevistador se percata de la actitud impasiva de Sara ante la situación. Dylan se seca la cara con un pañuelo de seda que saca de su bolsillo.)

– Ya me encuentro mucho mejor, prosigamos.

(45 años antes, 1 semana después del accidente. 22:00 PM Dylan se encuentra en la habitación donde está hospitalizada Sara.)

– Aún sigo sin creerme lo que está pasando, aún sigo sin entender cómo puede sucederme esto a mí, no logro comprender el vivir un futuro sin ti Sara. No puedo evitar pensar que puede que nunca llegues a despertar de tu letargo. No me quito de la cabeza ese horroso día, esa pesadilla que he vivido y revivido hasta el día de hoy, esas palabras que me dijo tu madre mediante llantos «Dylan, Sara está muy grave, a entrado en coma». Después de aquello el mundo se me ha venido encima, nada tiene sentido… solo tengo la esperanza de que abras los ojos y me des un beso de esos que tanto me gustan con esa ligera sonrisa que me volvía loco, de verdad Sara no me hagas esto, no puedo vivir sin ti.

(Dylan se queda dormido encima de Sara mientras éste le sostiene la mano.)

(8:30AM Dylan entra en la habitación de Sara, donde para su sorpresa sé encuentran los padres y el hermano de Sara.)

-¿Que hacéis aquí? Se suponía que hoy me tocaba a mí verla por la mañana.

-Dylan, nos ha citado el doctor, tiene algo que comunicarnos muy importante.

(Pasa media hora donde el ambiente es demasiado intenso e incómodo, Dylan no puede quedarse quieto ante la interminable espera por la aparición del doctor.)

– Disculpad la tardanza.

(Dylan alterado le pregunta al doctor.)

-¿Que es eso que tiene que decirnos doctor?

– Bueno, Sara tiene unos daños cráneo encefálicos muy severos, apenas puede respirar por sí misma. Siento tener que comunicar esto, pero Sara se encuentra en estado vegetativo, no va a despertar del coma. Lo siento, hemos hecho todo lo que hemos podido.

(Dylan se sienta conmocionado ante la impactante noticia, la madre de Sara le emerge una cascada de lágrimas de los ojos, su padre y hermano no son menos. El doctor abandona la habitación.)

– Tiene que ser una pesadilla, ¡tiene que ser una jodida pesadilla!

– Tranquilízate Dylan, sé que es muy duro, y yo también estoy totalmente destrozada. Pero no podemos perder los estribos ante una situación así. Vete a dar una vuelta y despeja la cabeza, te hará falta.

– ¡Ni hablar! Yo me quedo aquí.

(20:00PM Dylan, y los padres de Sara aún se encuentran en la habitación del hospital, con un rostro sumamente entristecido.)

-Dylan, lo hemos estado hablando, creo que lo mejor es que Sara vaya a un lugar mejor.

-¡Ni se os ocurra tener esa idea en mente!

-Dylan, mi hija no se merece estar así, yo la crié con todo mi amor, me duele dejarla ir pero más me duele verla en este estado.

-¡No porfavor! ¡No se puede ir de mi vida!

(Dylan comienza a llorar como si de un bebé se tratase).

-Esto no tiene que estar sucediendo, ¿Qué sentido tiene ahora mi vida si no está? ¡¿Qué sentido tiene?!

-Lo sé Dylan, pero Sara ya no va a volver, lo mejor es desconectarla.

(Dylan reniega la idea, pero en su interior sabe que es lo mejor. Después de 1 hora, decide aceptar la cruda decisión. El doctor está preparado para desconectar la máquina que le proporciona oxígeno a Sara).

-¿Estáis seguros de tomar esta decisión?

-Por supuesto.

(El doctor desconecta la máquina, Sara es oficialmente declarada fallecida. Los padres de Sara se quedan llorosos observando el cadáver de su difunta hija, Dylan con rostro impasible y ojos enrojecidos, se dispone a dar un beso a Sara mientras pronuncia unas palabras de despedida para su amada.)

– Adiós Sara, mi dulce Sara, te voy a echar mucho de menos, espérame que pronto nos veremos, Te amo.

(Dylan coge su chaqueta y se precipita por las escaleras en dirección a su vehículo, nada ni nadie le va a frenar. Ahora mismo solo piensa en ahogar sus pensamientos en alcohol.)

(3:00PM bajo una tempestad lluvia, Dylan se dispone a sacar las llaves de su vehículo, no es capaz debido a su alto estado de embriaguez consigue coger algo pero es su teléfono móvil con 15 llamadas pérdidas, ambas de su mejor amigo Dani y la madre de Sara, este arroja el teléfono con toda su fuerza al vacío. Consigue encontrar las llaves y entrar en el vehículo.)

– ¿Por qué? ¿Por qué la vida me lo da todo y me lo quita tan injustamente? No puedo vivir sin sus besos, sin su mirada radiante que me daba energía cada mañana, sin el olor de su pelo a frutas del bosque que tanto le gustaba. No puedo vivir sin esas noches de caricias, sin poder volver a escuchar esa risa que hacía reírme más a mí, su abrazados por detrás que me daban la mayor tranquilidad del mundo. No puedo vivir sin una parte de mí, se ha ido y algo dentro de mí se fue con ella. Definitivamente no puedo seguir en este mundo si ella no está a mi lado.

(Dylan se dispone a arrancar el coche en dirección a su casa, ebrio y con los ojos inundados en un mar de lágrimas. Dylan estaba destrozado, parte de su ser se había evaporado junto con Sara. Éste toma la carretera sin respetar absolutamente una norma de tráfico, con una velocidad extramadamente fuera de lo permitido. Se acerca una curva cerrada, la carretera está mojada pero no aminora la marcha, no le importa absolutamente nada, Dylan impacta fuertemente contra el quitamiedos de la curva, el coche tras el impacto da vueltas de campana. El vehículo queda totalmente siniestrado.