«Siento que escapas como viento resoplando fuerte,
Observo que sin dirección pareces estar y a tu paso todo lo derribas,
Solo cuando cae un techo mal hecho,
Me doy cuenta que el camino está mal trecho,
Viento callado que cuando vas despacio me pregunto
¿En qué momento te apartaste de mi lado?,
Hondeando por otras vidas, Soplando sin medida
Dejando atrás la vela encendida.
Susurro que expresa tus lamentos aligerados
Amargamente atreves del tiempo, traspasan
Las cortinas de mis pupilas vestidas con el amargo
De tu partida, risa fingida, besos incompletos
Que no expresan ni el más mínimo reflejo de tu amor inquieto,
Anhelo perdido en tu sinsabor repartido, como lluvia que
No cae, pero que sus relámpagos asoma como luces
Esplendidas que tu vista cautiva como a un alma perdida.
Amor moribundo a expensas de un arrullo, que sin medida
Surgió como agua de manantial en oasis de espejismo, pero
Que se seca como cactus con espinas que crece en medio de
Un abismo, que atreves del tiempo nunca quiso aceptar el maleficio.
Tiempo magnifico que todo lo transformas me harás resurgir
Como la más bella de las gladiolas, impregnada del olor de la
Victoria estaré y ya no más tu partida lamentare, porque ahora
El viento a mi favor regresa a través de tus hermosas laderas,
Hondeando la más inmensa de mis banderas».
Marihel Machado
OPINIONES Y COMENTARIOS