Como antiguo reloj…

Como antiguo reloj…

Sergio

15/10/2018

La luna ya se ha ocultado

Y no volverá a asomarse.

El beso ya se ha secado

Lejos, tan lejos que a pérdido todo su sabor,

Todo su dulce encanto,

Ése recuerdo ya se ha escapado

Y el saber que se sentía

El juntar, unir unos acaramelados labios.

El sol ya se ha marchado

Y no regresará esa tierna alegría

Que embellecían los minutos,

Las horas, los días.

El abrazo ya es un tempano muy frío;

Como lluvia de Julio,

Como atardecer de Agosto

Con sus calles desoladas y vacías;

Y sentado en el umbral yo,

Aguardó lo que no retornará.

Las siestas tan sólo serán un pasaje más

En un ir y venir de minutos

Que no avanzan al igual que yo

Y estático yacen esperando

Que todo vuelva a la vida.

Lo que ayer hubo ya no estará,

Se ha ido sin despedirse ni saludar.

El mirar que la dicha encendía

Como llama carente de oxígeno

Fue desfalleciendo el tiempo

Que mis ojos cerrándose fueron

De goteo en goteo

Ya hace mucho, en aquel momento

Donde observaron la crueldad

Del engaño y la fatídica mentira.

Ya no hay días, ya no existen noches.

Las siestas tibias ya son un mal recuerdo,

Eterna agonía, desbastadora melancolía.

Ya que por amar a quien no debía

Acabe yo mismo con mi alegría,

Mis ganas, mi valiosa y profunda felicidad.

Todo lo que en mi desbordaba

En otras circunstancias, en otras épocas.

Lo que ayer hubo ya no existirá,

En aquellos días.

Jamás regresará al ver

Lo que no debía

Mis ojos cerrándose fueron

Y por más que, ya hace mucho

De aquel tremendo descubrimiento

Mi corazón, mi alma y mi espíritu

Para siempre acabaron,

Como reloj antiguo,

De una pared pendiendo

En una casa solitaria, olvidada y pérdida

En un mar de desdichas,

Rodeado de temores

Y de desconfianzas infinitas.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS