Caíste
de sorpresa, caíste esperanzadora

Caíste
refrescante, caíste como bendición

En
este infierno verde, ardiente y sofocante

Renueva
con tus gotas mi espíritu, renueva con tu sonido mis oídos

Limpia
mis párpados

Permíteme
aprender a fluir, como solo tú, que eres agua, puedes hacerlo

Refresca
mi alma y limpia mi mente

Llévate
toda aquella suciedad que no pertenece

Hidrata
mis sentidos y renuévame para siempre… lluvia de junio.

Etiquetas: poesía

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS