Me
encontré en lo más profundo del abismo

Tinieblas,
demonios, la obscuridad absoluta

Habiendo
llegado ahí

Hallé
a la bestia más tenebrosa

Aquella
cuyo origen nace del absoluto negativo

Cuyo
actuar es casi inadvertido

Conocí
como nunca antes el verdadero terror

Soledad
total

Con
nadie más que yo mismo para consolarme

Me
batí en duelo con aquella enfermiza criatura

Con
nada más que cenizas de valentía

Y
escasa fuerza de voluntad

Vi
de frente su infinita mirada

Sorpresa
mía al ver lo frágil de ese espectro

El
cual mimetizaba mi fluir

Como
la danza más perfecta que haya sido ejecutada

Aquella
criatura al mínimo roce de mis palmas

Hizo
de si una en mil pedazos

Desvaneciendo
al instante aquella fatigante ilusión.

Etiquetas: poesía

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS