-Un Millar de Mirillas-

En este punto la vida había cambiado más de lo que podía recordar, la desgracia se cernía sobre aquellos que sobrevivieron al conflicto y aunque en un principio nos sentíamos afortunados por ello, tiempo después desearíamos unirnos a su silencio en vez de ser parte de esta interminable oda a la crueldad, el  hambre y la violencia. El mundo se ahoga en cada día más y una bocanada de aire se vuelve más un suspiro ansioso, seco y tedioso transformando las miradas en cuencas negras allanadas por el vacío que dejo los millones de muertos suscitando en nuestro interior el adiós a la cordura.

Tal vez el apuro deje en mis notas lo último de creatividad y carisma que mi persona poseyó, aunque banal mi preocupación, esta es la única forma que aún recuerdo serme útil para mantener mi optimismo a mi ya obvio final. Mi apreciación a los detalles de mi experiencia tras viajar un poco ha sido notar el brusco cambio en la actitud de las personas dada la situación que se dio con la caída rápida de las naciones más grandes dejando al resto en una pelea encarnizada por los ya escasos recursos que quedaban, tales conflictos mermaron casi la mitad de países del viejo continente. Tras mucho intentarlo finalmente son mis brazos quienes me arrastran al siguiente lugar de mi humilde morada, puede que esto no lo encuentre nadie, pero ya no me preocupa como antes, demasiadas miradas ocultas tras mirillas se han llevado la voz de conocidos y desconocidos, tan solo un retumbar en la tierra tras el olor a pólvora y humo que dibuja en línea recta el final del camino que otros tuvieron aunque ahora es casi un alivio el saber que no se perdieron de nada.

Me siento cansado, el frío se vuelve parte de mi cuerpo y el entumecimiento de mis piernas parece ser el preludio de lo ya evidente, junto a la ventana observo por última vez el exterior de una historia que llega a su final sin que nadie pueda evitarlo, héroes.. tiranos.. o simples ciudadanos reducidos a polvo y silencio guiado por el viento de un mañana que ya no alcanzaré. Son mis letras el último recurso que expresan emociones e ideas que retomo intentando preservar la humanidad que forjo la vida que descuidadamente dejamos de lado, ahora ya cansado espero que de ser encontrado, sepas dirigirte a un mejor puerto, uno lejos del pasado donde el presente no sea una tierra gris o un cielo ardiente.