¿Por qué perdemos la esperanza?

La esperanza es el sentimiento más fuerte de todos. Porque sentir esperanza cuando todo parece que va a seguir siendo malo, es lo que nos mantiene firmes. Y lo que provoca que a la larga, todo sea bueno. Lo que pasa es que a veces todo mejora, sin que tengamos esperanza. Es por eso que quiero explicar como funciona estar desesperanzado.

Cuando algo es malo, o mejor dicho cuando todo es malo hay que entender que es malo por un motivo. No porque falle, no porque se dañe. Es malo, porque es importante. Y es malo, porque tenemos que estar mal. Hay que darse cuenta que el sentido de la vida no son los objetos, o las cosas que hacemos con nuestra existencia. El sentido de la vida, somos uno. Cuando algo se daña, cuando algo falla, es por uno que pasa.

Nosotros perdemos la esperanza cuando no sabemos como puede mejorar algo. Así que lo que hay que entender, es cómo es que no sabemos algo.

Primero hay que comprender que todo parte de uno. Y uno es un sentimiento, así que todo parte de lo que sentimos. A partir de lo que sentimos es que podemos ir construyendo nuestra acción. Y mediante nuestra acción es que podremos entender lo que nos ocurre. Así que para poder entender por qué nos pasa algo, hay que entender nuestro sentimiento.

Nosotros no tenemos esperanza por algo, cuando sentimos que no tiene solución. Cuando creemos que no hay salida. La cuestión es ¿Por qué nos sentimos así?

Para poder vivir la vida, necesitamos tener un concepto de lo malo. De lo peor posible, bajo el que podamos construir una acción. Las cosas son malas, para que tengamos un concepto básico de lo malo. Un concepto de lo que es lo peor posible, bajo el que podamos mejorar.

Algo es malo, para que tengas la idea de lo malo. Una idea causada por el hecho de que sea malo. Es decir, la razón por la que algo es malo. Es para estar mal. Para sufrir. Para que duela. Para que pierdas. Para que mueras. La pregunta es por qué.

Hay que entender que el hombre no vive de sus recuerdos, o de sus expectativas. El hombre vive de su inmediatez. Gracias a eso, todo cambio que sufra el hombre es un cambio que ocurre en su vida inmediata. ¿Por qué todo es malo? Para que sea malo en el momento en el que te encuentras ¿Por qué? Para que lo vivas ¿Para qué? Para que cambies. Hay que darse cuenta, que estamos mal, para estar bien. Para que estar bien, pueda ser bueno.

Estar mal se divide en dos áreas. En aceptarlo y combatirlo. O en rechazarlo, y negarlo. Es muy, muy, demasiado importante. Que cuando estemos mal, lo aceptemos, lo entendamos, y hagamos algo por corregirlo. Porque estar mal solo pasa, cuando no haces nada por combatir lo malo. La vida es para que nademos millones de metros, sin oxigeno. Para que despues tengamos bocanadas de aire, que nos den la esperanza de que todo pueda ser bueno. Para que cuando lleguemos a nuestra meta, volvamos a empezar. Pero esta vez con el conocimiento, de como debimos haber hecho todo desde un comienzo.

Nosotros debemos estar mal, y debemos pasarla mal. Para que lo combatamos, y seamos felices. Es por eso que cuando algo malo pasa, no huyas de eso. No lo olvides, no lo metas bajo la alfombra. Afrontalo de frente, y mirale a los ojos. Y dile -Aquí el que manda soy yo-. Porque lo malo, es para dominarlo, es para tomarlo por tu mano, y nunca permitir que te dañe.

Es importante pasarla mal, pero mas lo es todavia hacer algo por no estarlo. Así que cuando estés mal, descubre qué debes hacer para volver a estar bien. Y haz eso, eternamente. Porque siempre estar bien, no es que nunca pase lo malo. Es siempre mejorarlo.

La maldad es para mejorarla. Y una vez que lo hagamos, mejorar uno.