Entrabas corriendo por esa puerta dejando sólo el olor de tu pelo, y como en una película, parecían sonar acordeones y gaitas

La gravedad te hacía reverencia cuando tus muslos se movían a tus pasos

Siempre ibas descalza, tocando la tierra, con dolores en la cabeza, en el pecho, en el estómago 

Y yo tomaba todo lo que soy y lo ponía en una cajita de madera, para que te mantuvieras contenta para siempre

Prendida de un hilo tu cabeza, intentando ser igual a todos, intentando amarlos, intentando reír con ellos

Pero mi cajita se está rompiendo, hay bichos allí dentro, y con cada agujero tus pasos se vuelven más lentos 

Tus muslos ahora apenas se mueven, y las gaitas se van durmiendo 

Y todo lo que soy está escampando, tu aliento se está soltando, sabe a leche caliente, como si fueses un niño pequeño 

Y aún triste, bailas, porque eres tan divertidamente bella, aunque te guste rodearte de poetas

Y aún triste, riegas con tu llanto los tulipanes que te rodean, porque eres increíblemente buena

Tus pies torpes se tropiezan,  tu cráneo se rompe, y nadie se da cuenta

Tu cráneo se rompió al compas de las gaitas, porque la gravedad hoy no te ama

Y de la explosión de toda tu sangre, crecieron tulipanes en la tierra

De la explosión de tus sesos se fertilizará la tierra 

Y las gaitas siguen sonando 

Toda la gente que amaste sigue bailando

 

 

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