¡Libertad! plena, real y segura
¿quien podrá hallarla?
porque aunque mis pensamientos
vuelen hacia el infinito y divaguen
sin rumbo fijo, cautivos están de ti,
que sin proponerte siquiera, has entrelazado
todos ellos, y aunque mis ojos
vean la luz del día con todo su glorioso amanecer
y la naturaleza plena que ante mi se manifiesta,
con dolor puedo decir, que nada puede superar
a tu rostro dibujado en el, y aunque mis pies
pueden llevarme lo mas lejos de ti,
hasta prácticamente huir, con dolor, lo tengo que admitir
que hacia ti solo me quiero dirigir, y aunque
mi espíritu rebelde, y muchas veces indomable
me dice una y otra vez; calla, olvida, huye,
a lo cual, tontamente yo, aceptarlo no puedo, no,
no quiero, ya que mi voluntad a ti se ha rendido.
¡Libertad! ¿Dónde estas? ¿Cómo te hallo?
mi corazón pregunta, día a día,
mientras tú, sin siquiera proponerte,
mi vida entera has encadenado.
OPINIONES Y COMENTARIOS