—¿Me amas, papito?
—Más de lo que te imaginas, hijo —respondo mientras, tratando de esbozar una sonrisa, empujo su silla de ruedas cuesta arriba camino del parque, como cada día, y mi corazón llora en silencio.
—FIN—
—¿Me amas, papito?
—Más de lo que te imaginas, hijo —respondo mientras, tratando de esbozar una sonrisa, empujo su silla de ruedas cuesta arriba camino del parque, como cada día, y mi corazón llora en silencio.
—FIN—
OPINIONES Y COMENTARIOS