Carnaval de medianoche

Carnaval de medianoche

S.L Salazar

23/12/2022

Capitulo 1: Cenizas

Todo comenzó en una noche sombría de 1347 en la región de Walden ubicada en el ala sur de Argentum, era casi fin de año, pero ese día en vez de ser caluroso como de costumbre era frío, muy frío, tal que parecía invierno. Los pueblerinos de la zona hacían los preparativos para la fiesta comunal de fin de año, era muy común que se hiciera debido a que todos los habitantes del pueblo, cenaban en una gran mesa para poder así celebrar el inicio de un nuevo año.

El joven Lyon Mauszch llegaba al pueblo por invitación de su tía, él era muy afín a ella, pero de vez en cuando le daba miedo, por creer que era una bruja, y los cuales tenía motivos, pero eso no le importaba el día de hoy. Lyon solamente buscaba divertirse esa noche, además se reuniría con viejos amigos que no veía desde su infancia. Al llegar a la casa de su tía él la nota vacía, pero sin importar nada deja sus cosas en el suelo y sale a recorrer el pequeño pueblo, pero antes de irse es tomado por el brazo, al darse vuelta ve a su tía. – ¡tan rápido llegas y tan rápido te vas! – exclamó Mabel con una sonrisa en la cara, – estaba por ver a mis amigos- contestó Lyon denotando apuro en sus palabras, abrazó a su tía y se fue, – estos jóvenes no cambian más- dijo la tía poniendo los ojos en blanco.

El joven se encontró con sus amigos que estaban ayudando a sus padres para el festín de la noche, – Lyon tanto tiempo- Le gritan sus amigos con expresión alegre, -¿cómo andan?, volví al pueblo después de tanto- dice Lyon estrechando las manos de sus amigos, para luego ayudarlos con los preparativos para la noche. Todo era alegría y durante la tarde todo el mundo decoraba sus casas y las calles, para poder recibir el año con mayor felicidad y alegría. Al caer la tarde noche todos vuelven a sus casas para arreglarse, además era la noche en donde muchos jóvenes solteros encontraban pareja, así que sin dudarlo todos se vestían elegante aquella noche.

Luego de ayudar a sus amigos, Lyon vuelve a la casa de su tía para merendar como era de costumbre, su merienda favorita eran unos churros con mates, una bebida de hierbas que se solía tomar en el país entero de Argentum, mientras estos dos merendaban, Lyon como joven curioso dirigió la mirada a una estantería con libros de su tía, – ¿qué son esos libros tía?, no estaban la última vez que vine, vos no leías mucho- dijo Lyon, – muchas cosas cambiaron desde la última vez que viniste sobrino, esos libros son algo que van a servir para más tarde, pero vos no te acerques a ellos- dijo la tía en un tono burlón pero a la vez serio. El joven se quedó perplejo, pues los libros le llamaban mucho la atención, estaban bordados de una forma que nunca había visto, además de que su casa olía a hierbas y no por el mate, sino a cuando una hierba está quemándose. Sin darle más importancia, él se acuesta a dormir para poder despertarse con más energía en la noche.

Despierta- susurra una voz, Lyon se levanta de un sobresalto, mira para todos lados y no ve a nadie, se incorpora de pie para fijarse por la ventana para darse cuenta que llegaba tarde a la cena, ya casi todos estaban reunidos, por lo que Lyon se vistió rápido , se arregló y salió hacia el gran banquete, dónde sus amigos y la chica que estaba enamorado desde pequeño lo esperaba, Ilein keith, una joven con la piel color canela y los ojos parecidos a los grano de café, simplemente era la jóven más hermosa del pueblo, y el amor jamás logrado de Lyon.

La cena comenzó y todos festejaban, Lyon y su amor imposible cruzaban miradas, Ilein susurraba con sus amigas y se reía por lo bajo, – seguramente deben decir que soy muy apuesto – dijo Lyon, – ni en tus sueños- le respondieron sus amigos riéndose a carcajadas. La cena estaba muy rica y todos estaban bastante llenos para seguir comiendo, además, todavía faltaban los dulces y el brindis final, no podían llenarse de más. Luego de un par cervezas y risas, Lyon decide acercarse a Ilein para hablarle, – hola Ilein, ¿Podemos hablar a solas? – dijo Lyon con la voz un poco tímida, -Claro- respondió Ilein con sonrisa burlona mientras miraba a sus amigas. Ambos se apartan a un lado de los demás, pero Henry, el bufón del pueblo los sigue para molestarlos, – no molestes, o te saco a los bifes- le gritó Lyon a Henry en tono de enojo, – cálmate- le recalcó Ilein,

  • Al fin solos… ¿Qué querías decirme Lyon? –
  • No sé realmente cuando me vaya a quedar en Walden, pero debo decirte algo antes de que me vaya-
  • Bueno, yo también tengo algo que decirte
  • ¿En serio? ¿y qué es?
  • Bueno tengo que decirte esto…- Ilein besa a Lyon antes de que el pudiera decir palabra alguna, Lyon le devuelve el beso y ambos vuelven a la mesa sin decir absolutamente nada.

La hora final estaba llegando, los adultos preparaban los fuegos artificiales, la tía de Lyon, Mara junto a otras señoras preparaban la mesa dulce, marcando que estaba por comenzar un nuevo año. Mara mira a Lyon y con ojos brillosos – ya vuelvo querido sobrino, ten cuidado- dijo Mara nerviosa, Lyon la miro con extrañeza, tenía 22 años, ¿De qué debería cuidarse? Se supone que no habría nada que temer.

La mesa dulce estaba servida, las copas llenas de sidra acompañaban a cada uno de los presentes en aquel banquete, lo más adultos estaban listos para encender aquellos fuegos artificiales estruendosos. Tres, dos, uno la cuenta regresiva marcaba el fin y el comienzo de año, Lyon e Ilein se besaron, los fuegos artificiales alumbraban el cielo, todos festejaban y bebían de sus copas, hasta que un frío sombrío lleno el ambiente, unas risas macabras se escuchaban por lo lejos como si el viento hablara, se podía oír una voz ronca recitando repetidamente la frase – todos caemos, cenizas en el cielo, cenizas en la tierra, cenizas en el agua, uno, dos, tres- mientras unas campanadas que parecían marcar el fin sonaban muy fuertes.

Capitulo 2: Infección

Nadie podía creer lo que pasaba, y más en las tierras tranquilas de Walden, realmente allí toda la gente era pacifica, demasiado tranquila al punto de no tener ningún guardia presente, todo pasó muy inesperadamente y rápido. Un grito de dolor se alzó sobre la conmoción de la gente, todos voltearon, era Henry, estaba llenos de bubones por todo el cuerpo, mientras gritaba su cuerpo se desplomo al suelo, contorsionándose a la vez que gritaba muy fuerte, su carne parecía pudrirse y su corazón detenerse, sangre negra chorreaba por su boca. Los niños corrieron despavoridos a sus casas, algunos padres y madres se quedaron con ellos mientras otros, se quedaban observando la situación del pueblo, Till el médico se acercó para asistir a Henry, pero nunca había visto algo así, nadie sabía que hacer ante tal situación, Lyon preocupado por su tía Mara empieza a buscarla por todos lados y gritando su nombre, pero no logra encontrarla, – de seguro se escondió luego de pasar tal evento desafortunado- pensó Lyon mientras caminaba hacia su casa. Al llegar se percata que la casa de su tía está toda desordenada y sin su tía adentro, de pronto escucha un grito de horror la calle, Lyon sale y ve como el cuerpo de Henry se levanta de los adoquines, se veía como inerte , sin vida, sin capaz de razón alguna era muy extraño, pero todo en esta noche es extraño, la desaparición de Mara, las risas y las voces diabólicas, las campanadas y ahora el Bufón con esa rareza en su piel, tan sólo habían pasado aproximadamente dos horas de todo lo ocurrido.

El ambiente se tornó tensó y todos dejaron de hablar, Till se acerca al cuerpo inerte de Henry, – ¿Henry? ¿me escuchas? – preguntó el médico intentando ayudarlo en vano, el Bufón se abalanzó sobre Till con violencia y logró morderle su brazo, Till retrocedió ante tal acto, sosteniendo su brazo herido, Henry avanzó hacia el grupo intentando atacar a quien pudiera, – Henry, Henry, reacciona, reacciona- dijo Lied el granjero del pueblo sin obtener respuesta de su parte, parecía no entender. Asustados, todos corrieron hasta sus casas, Lyon agarró de la mano a su amada Ilein y la llevó hasta la casa de su tía, – no voy a dejar que nada te pase- dijo Lyon agitado con el corazón que parecía salirle del pecho, Ilein lloraba del miedo, no sabía que era lo que estaba pasando, todavía era de noche, seguramente todavía no pasaban las tres de la mañana, Lyon intentó calmarla a Ilein lo más que pudo.

Afuera una niebla empezó a espesarse y aparecieron tres sombras que parecían unas mujeres encapuchadas, las tres alzaron la voz y al unísono dijeron, – La plaga aquí está, la tierra es de él, la cuenta regresiva comenzó y no hay vuelta atrás, tres, dos, uno , el inicio del fin empieza- Las mujeres rieron de forma malvada, a la vez que desaparecían en la niebla espesa y oscura, ahora las calles solamente estaban vacías con el cuerpo de Henry vagando, su piel parecía pudrirse y de su cuerpo brotaba un líquido negro parecido a la sangre. Lyon agarró de la mano a Ilein, – ¿plagas?, ¿Ilein escuchaste eso? – preguntó asombrado – escuche todo, no sé qué pensar ante todo esto, no entiendo que está pasando- dijo Ilein desconcertada, intentando procesar todo aquello que pasó. Lyon intentaba consolar a Ilein mientras no apartaba la mirada a los libros de su tía, los cuales todavía permanecían en aquella repisa, sin haberse caído al suelo. Aquellos libros denotaban mucha intriga, tenían símbolos raros y bordados que nunca se habían visto, Lyon toma esos libros y se da cuenta que son todos de magia y brujería, sorprendido mira a Ilein quien estaba sentada en un rincón acurrucada y sin dudarlo abre una página y la lee.

En la calle todo era silencio, excepto por el ruido que emitía Henry mientras caminaba, de repente se escuchó un grito, era Till, estaba afuera retorciéndose y llorando en el suelo, Él estaba convirtiéndose, estaba cambiando completamente su rostro, espuma blanca le caía por la boca y, en su cuerpo, otra vez le brotaban los bubones y cada vez más se expandían por todo su cuerpo, parecía una locura, Henry ya no trataba de lastimarlo, de todas formas ambos parecían moverse ligero, como si buscasen a alguien cautelosamente, sus rostros llenos de esa espuma y su putrefacta eran muy notables, todos los vecinos del lugar miraban la escena de la calle , horrorizados. El pánico aumentaba en el pueblo, nadie creía lo que pasaba y estaban todos asustados, unos valientes vecinos intentaron atacar a Henry y Till para poder tratarlos más tarde, pero fue en vano, todos ellos salieron heridos, inclusive el padre de Ilein.

Lyon leía con atención el libro de su tía, a la vez que se reflexionaba donde estaba ella, había desaparecido completamente. Nadie sabía donde estaba de hecho, la noche era muy densa y muy alterada. Lyon encontró hechizos y explicaciones de lo que sucedía, estaba boquiabierto no sabía como reaccionar ante todo esto, necesitaba salir de aquel lugar, todo estaba por empeorar cada vez más y él lo sabía, lo había leído.

Ilein se acerca hacia Lyon para abrazarlo, llorando, acababa de ver lo que sucedió con su padre , pero no podía salir de la calle, no era segura, – Lyon, tenemos que encontrar la forma de salir- ella sabía que era difícil, Lyon la agarra de la mano y sin pensarlo le explica lo ocurrido y sobre el libro, Ilein se sorprende, pero no había tiempo para preguntas, necesitaban salir de allí, – vamonos Ilein vamos a hacer lo posible para evitar cualquier herida-.

Etiquetas: fantasía

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