A veces necesitas tener una cita sorpresa con esa persona especial, a la que tienes que querer antes que a cualquiera: ¡TÚ!. Salir de casa sin que tengas que correr porque alguien pasará por ti, o enfadarte porque alguien llegó tarde a la cita. Tener una cita no planeada. Caminar en el centro comercial, para comprarte algo que te gusta o simplemente caminar viendo tiendas. Disfrutando de tu soledad, de un tiempo a solas contigo. Como ir a una cafetería, ordenar tu café favorito, leer algunas de esas páginas de ese libro que tenias olvidado o de tu autor favorito, escribir unas líneas de eso que querías escribir hace mucho, aunque sea en la orilla de la servilleta. Sí, un tiempo sentada en medio de las demás personas que andan en su corre corre, mientras tu sonríes con tu compañía, sentada en esa mesa, una mesa para uno.
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