Tragedia, desgracia y bendición.

Siglo XX

Petén Itzá

Carmen Ixcoy Pérez, una niña de apenas catorce años, fue abusada sexualmente, de aquel abuso, lleva en su vientre un bebé al cual no quiere para nada cerca de ella, por lo cual ya tiene pactado con las autoridades competentes, dejar aquel bebé en un orfanato del sistema de adopciones. Su casa lejos de cualquier aldea o pueblo, Carmen siguió con su vida; sale a hacer compras o visitar parajes exóticos para pasar el tiempo, bañándose en hermosos río y hermosos paisajes de la naturaleza verde de Petén, Guatemala; lugares tan maravillosos que parecían cómo sacados de una fantasía, de cuentos de hadas; pero son una realidad palpable y vivible. Sin embargo son lugares poco transitados y muy solitarios; apropiados para cometer cualquier crimen sin que haya ningún testigo. Fue de allí, de donde aquel psicopata tenía planeado raptarla, llevarla hasta su casa y sacrificar a aquella indefensa, sobre el sarcófago de su obsesión, es la única manera con la cual podría abrirlo y según él, apoderarse de cualquier tesoro que aquel sarcófago tuviese dentro.

Carmen está por cumplir quince años, con un bebé indeseado de algunos meses gestándo en su vientre, ella no ve posible celebrar una fiesta tan importante; para una chica es la fiesta más esperada; ella piensa que le hubiese ido un poco mejor si su madre, le hubiese permitido un aborto; mas la made de Carmen siendo, madre soltera y muy católica, para ella era más aceptable traer al mundo al bebé y darlo en adopción. Carmen no estaba planificando fiesta alguna; sin embargo, su madre; de manera de sorpresa le esta organizando algo, para ayudarle a su hija con su autoestima y pensando en hacerla sentírse un poco alegre, que por unas horas se pueda olvidar de la desgracia que le tocó vivir a tan temprana edad.

Los lugares que a Carmen le ayudan a olvidar su tragedia, son aquellos hermosos, lejanos y solitarios parajes naturales, mágicos, pero siendo una jovencita indefensa, es muy riesgoso que ella esté sola por aquellos lugares. Pocos días para que su madre le dé la sorpresa con una fiesta de quince que no espera, decide ir a sumergirse a los manantiales más alejados que conoce; no sabía que una bestia estaba tras de ella como una fiera hambrienta, Carmen avanzaba hacia sus hermosos lugares de escape, pensaba y proyectaba su vida a un futuro no muy lejano, viajando a la ciudad, para trazarse nuevo horizonte, nuevos caminos. Pero su futuro está por ser truncado; a quinientos metros para llegar a su destino y a más de un kilómetro de su casa; la comienza a seguir aquel impune, sanguinario psicopata; al tener la oportunidad perfecta, como una bestia feroz arremete en contra de aquella muchachita; Carmen al sentirse atrapada, comienza a luchar por su vida y en el afán, ve una cara conocida, aquella bestia, es el mismo inhumano que meses atrás de ella había abusado, por lo que luchaba con uña y dientes, sus piernas y sus manos para intentar escapar y librarse de aquel psicopata, mas aquel bestia, apura bofetada hace que aquella chiquilla pierda el conocimiento, ya Carmen toda magullada, ensangrentada, sucia y completamente vulnerable, amarrada y amordazada, se la echa al hombro y la llevó a donde tenía lo necesario para cubrirla y el vehículo que le servía para llevársela y pasar desapercibido de cualquier transeúnte que se encuentre por el camino.

Sin ningún contratiempo, aquel sanguinario psicopata llega a su guardia; las horas pasaban y mientras aquel psicopata espera por el amanecer y toma una siesta; Carmen despierta aturdida y muy adolorida, poco a poco recupera el conocimiento y empieza a reconodar lo que le ha sucedido, con las fuerzas que le quedan, logra desatarse, los golpes le han dejado una pierna fracturada por lo cual no puede moverse con ninguna facilidad, muy sigilosamente busca la manera de escapar de aquella mazmorra.

En casa de Carmen, su madre está muy preocupada, pues Carmen nunca ha estado hasta tan tarde por el campo, menos en el pueblo; por lo que de inmediato busca a sus vecinos más cercanos para indagar sobre su hija y pidiendo ayuda para que le ayuden a buscarla; doña Asunción, su amistad más cercana ofrece su vehículo para ir a la policía a levantar una denuncia. Sabiendo que debe esperar veinticuatro horas para que las autoridades tomen la ausencia como desaparición formal, Adelaida, la madre de Carmen decide ir con la policía, además, el violador de su hija, aún no ha sido capturando; por lo cual, las autoridades tomarían de inmediato el caso; Adelaida reza para que su querida hija esté viva.

Ya dan las tres de la madrugada, aquel saqueador, psicopata, se dirige al lugar en donde tenía a la victima del sacrificio que está a punto de realizar, aquel bárbaro pudo dormir un rato y con tantos bostezos, llegó al lugar en dónde se suponía, estaba la jovencita que iba a sacrificar; pero para su sorpresa, aquella jovencita ya no estaba allí, de inmediato toma un foco de baterías descartables y comienza a buscar pistas que le indiquen el camino por el cual escapó Carmen; aquella joven herida y sangrante, va dejando un trazo muy evidente de su ruta de esape, y ya estando como a cincuenta metros de aquella mortal cárcel, llega cerca de un pequeño río en donde logra saciar su agobiante sed; con las heridas y la pierna rota y muy hinchada; se le hace casi imposible continuar, además que le ha llevado mucho tiempo para poder avanzar tan sólo unos metros, Carmen estaba tomando un poco de aliento y sacando fuerzas de donde ya no habían; recostada sobre un sauce; con un pedazo de madera, Carmen recibe un fuerte golpe en su espalda, aquel despiadado psicopata, la hace caer de bruces sobre aquel pequeño río, aquel inhumano golpe hace que Carmen vuelva a perder el conocimiento.

La luz del alba no tardará en fulgurar. Carmen vuelve a recobrar el conocimiento, pero esta vez, está bien atada sobre un extraño objeto para ella; un terrible dolor se esparce por todo su cuerpo, porque despertó mientras aquel sanguinario saqueador la apuñalaba constantemente; ¡por favor, no me mate!, exclamó Carmen, el bebé que llevo en mi panza es suyo, ¡no me mate por favor!, volvió a suplicarle Carmen; ¿crees que a mi me importa un poco tu vida o de lo que llevas en tu panza?, !me importan nada!, le dice aquel psicopata; a mi sólo me interesa mi recompensa, es mi único propósito, abrir el artefacto en el que estás atada y tu sangre y tu muerte y la de tu hijo, es lo único que me ayudará. ¡Por favor no me mate!, seguía suplicando Carmen, mientas agonizaba, aquel psicopata le abre el vientre, saca al feto y al instante lo parte en dos, haciendo así que las sangres de la madre y del hijo se mezclen, al mismo tiempo que los primeros rayos del alba nacen. (Las exclamaciones rogando misericordia, de nuestro personaje, Carmen, son basados en una historia real, sobre un asesinato de una fémina,algo cerca a mi colonia; esas palabras, confesó el malhechor, que le suplico la mujer mientras la apuñalaba repetidas veces en el estómago, hasta darle muerte).

El cuerpo de Carmen completamente destripado y el cuerpo de su bebé sobre ella partido por la mitad, una escena sangrienta, aquel saqueador, extasiado por su crimen y bañado en las sangres de sus victimas, gritaba eufóricamente, ¡lo logré, es mío, el tesoro es mío!. Inmediatamente cuando los rayos del alba comenzaron a brillar, aquel extraño sarcófago se abre y de éste, se levantó, aquel ser extraño que muchos años atrás se presentó ante los mayas como un dios, al salir del sarcófago, aquella criatura, comienza a decir una serie de palabras en un lenguaje extraño, fue cuando una fuerza sobrenatural hace explosión, sin derribar nada a su alrededor, pero provoca tanto viento que mueve hasta la silla de madera que estaba en aquel lugar, cuando el viento se calmó, la tierra se abre en dos y un ser traslúcido comienza a surgir de aquella apertura de la tierra, aquel ser se apresuró a bañarse en la sangre que fue depositada al rededor del sarcófago, fue cuando el saqueador vio el grave error en el que se había metido, era un horrendo ser, una criatura que sólo con la sangre mostró su horripilancia; 

aquel saqueador aterrorizado intenta escapar, pero aquella criatura se mueve de una manera sobrenatural, tanto que aquel psicopata apenas y logra dar un paso, cuando aquella criatura ya está sobre él y lo abre y poco a poco bebe su sangre y se come sus órganos vitales, mientras lo descuartiza en vida, matándolo lentamente; durante éste proceso el ser que se hizo pasar por un dios, con los mayas, le transfiere su esencia a aquella criatura, desintegrándose en su proceso, otorgándole su fuerza vital a aquella horripilante criatura.

Sin embargo, aquellos trece guerreros mayas, que dieron su vida en su época; para atrapar a aquel falso dios e impedir la llegada de aquella traslúcida, horrenda y mortífera criatura, mágicamente introdujeron un código, energía especial, un código secreto, indetectable e indestructible, en aquel falso dios; la cual se activaría y crearía una escritura;

instrucciones de cómo detener a aquella horrible criatura, si el falso dios, hacía contacto con ella, trayéndole sobre esta tierra; mientras el falso dios emite y traspasa su poder a la criatura del infierno, una fuerza, energía mágica escribió las instrucciones sobre las rocas no tan profundas en donde se lleva a cabo el macabro ritua; ritual que hacía falta para hacer surgir a aquella criatura del infierno; mas aquellos valientes guerreros con la información que alcanzaron obtener sobre estos seres del inframundo, también obtuvieron información información sobre la manera de cómo detener a la criatura y de cómo dejar información importante para ayudar a quienes lo necesiten, de esta mágica manera e inesperada, sorpresiva, pero efectiva, además es una energía indetectable por aquellos demonios, de esta manera ellos proveerían pistas de lo que en verdad son aquellas criaturas y de cómo podrían detenerlos;

esto será en el tiempo y fechas exactas, cuando un ser humano valiente, con grande fortaleza para sobreponerse sobre toda desgracia y lleno de amor, todo esto muy necesario para hacer frente y detener a la criatura del infierno.

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