Los peces koi son unas hermosas criaturas que abundan en países como China y Japón. En la cultura China es bastante común la leyenda del pez koi, pero quizás muchos de nosotros no la conocemos, o no sabemos que secretos se esconden detrás de tan icónico animal.

Según cuenta la leyenda, un buen día, un inmenso cardumen de peces koi se encontraba en las caudalosas aguas del Rio Amarillo en China, también conocido como el Río Celestial, y tenían la difícil misión de atravesarlo en contra de la corriente.

Todos los peces que allí se encontraban tenían un objetivo común: llegar a la puerta del dragón. Pero, ¿cómo iban a hacerlo si la puerta quedaba justo al otro lado, a miles de kilómetros de distancia, y en sentido opuesto al curso del agua? Era una tarea difícil.

Sin importar el reto que implicaba, todos se pusieron a lograr la meta. Muchos de ellos no lograron resistir mucho y prefirieron seguir nadando con la corriente, perdiendo de vista a los que nadaban contracorriente. La travesía duro algunos años, algunos se perdieron en el camino, algunos lograron llegar hasta la mitad… pero los que seguían avanzando cada vez lo hacían con más ligereza, ganando con el tiempo no solo mayor velocidad sino también aumento en su masa muscular: haber aprendido a nadar en contra corriente les permitió fortalecer sus cuerpos, por lo que nadar era cada vez más sencillo. Con todos estos cambios sobrevinieron también nuevas habilidades, como aprender a saltar lo suficiente justo en los puntos en los que el agua corría con más fuerza, para no ser derrotados y seguir avanzando.

Los peces koi que seguían nadando contra la corriente por fin alcanzaron la Catarata de la Sabiduría y tras atravesarla pudieron experimentar toda una metamorfosis: sus cuerpos eran más fornidos, de repente podían respirar también fuera del agua y de sus lomos comenzaron a emerger unas alas doradas: se habían convertido en dragones. Al advertir que habían alcanzado su anhelada meta, todos los nuevos dragones celebraron con regocijo, volando ahora, y con mayor velocidad y habilidad, hacia las aguas calmas del Río Amarillo, donde se encontraban aquellos koi que se rindieron al comienzo del camino y aquellos que aún no tenían conocimiento de la existencia de la Puerta del Dragón. Les contaron todas sus aventuras, proezas, todo lo que aprendieron y sobre la hermosa transformación que vivieron al llegar a la Catarata de la Sabiduría. Fue así como un nuevo cardumen de peces koi, ahora motivados, emprendían su camino de descubrimiento hacia el cambio.

Es así como esta hermosa y metafórica historia nos deja mucho que aprender de los peces koi, símbolo universal de la fortaleza, la constancia, sabiduría y transformación.

Muchas veces, cuando estamos en nuestra zona cómoda, en las aguas calmas del Rio Amarillo, no encontramos la motivación suficiente para salir de allí en búsqueda de lo que realmente deseamos, anhelamos, aquello que queremos cambiar. En el camino nos encontramos con obstáculos que nos impiden avanzar o que hacen nuestro camino más difícil, nuestros propios demonios de las aguas. Sin embargo nos encontramos con fuerzas también muy poderosas que nos inspiran a continuar nuestro camino, a buscar el cambio, la mejora permanente.

Quizás te has rendido o a has dejados metas inconclusas a causa de la adversidad. Puede incluso que te hayas cansado de nadar en contra corriente y decidieras regresar a tu zona cómoda. No obstante puedes volver a inspirarte y comenzar otra vez, lo que has vivido hasta hora te ha vuelto mas fornido y ha creado en ti nuevas habilidades. Ten ánimo y vuelve a nadar en dirección a tu meta, sueño o anhelo.

Si aún no te has rendido y sigues luchando para llegar a la Catarata de la Sabiduría, te motivo a que sigas teniendo valor y con perseverancia nades contra corriente. Tu perseverancia te llevara a la gloria.

Mosquera Yuliangelene.

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