A la escritora

¿Qué he de decirte a ti de la poesía querida Escritora,

tú que eres todas ellas y no lo dices?

Cuando resuelta llegas,

y aún no se ha detenido sobre el papel altanero el verso,

tú lo engendras, lo concibes

rompen aguas, se hacen olas, se revuelven las espumas,

se contraen todos tus dedos.

¿Qué he de contarte si nace el poema de tu carne?,

respira, late,

llora de emoción toda tu pluma,

y cuando lo acunas y lo nutres,

nos lo muestras a los que te leemos,

y nos lo das en adopción por algún tiempo.  

Pobre de mi, cómo contarte algo de poesía,

tú que doblas las palabras sin quererlo, de la mejor escritura,

cuando pasas y se inclinan como si fueran a un rezo.

Desde lejos parecen un laborioso hormiguero,

llevando al verso

 el murmullo de las sílabas confusas, cuando son tomadas desde la mano al poema 

se colocan y quedan rendidas.

Tú que con pocas palabras comprendiste porque vibra mi lápiz, y se humedecen mis folios

y me aliviaste

haciendo de mis cimientos plumas y el caminar sea tenue, blando, eterno.

Vuelas aunque no lo creas, como en tus dormires,

con los brazos abiertos, con los que abrigas a todos tus pedigüeños,

y tus pies se separan de los suelos,

y nos saludas con todos los dedos diestros,

los mismos que con palabras hacen historias.

Los que cierran las ventanas para que no entren los miedos.

Sí, estimada Poeta, aparécete de nuevo,

lléname con las metáforas blancas,

esas que cubren de magia tus argumentos 

y la fila de palabras cotidianas que la siguen.

No, nunca querida Poeta, la del nombre extenso, con eco,

la que lleva en sus espaldas el peso de su modestia,

juntaré esas frases que describan, mi Admiración y Respeto,

ese contraste de saberte siempre en lo alto

como yo quiero contarlo. 

—

PD 1; Esto sé de la Poeta que gustó un día del cuento de los perros guardianes y el labrador. 

PD 2; «–Sí ya lo he puesto Pocholo, son las palabras mágicas de hoy: Admiración y Respeto, ¿Con la A y la R grandes dices?, con esas mismas.

Buenas noches mis apreciados potos. Acuéstate en tu cama, ….sssssss…. y por favor no ladres hoy.

Ya sé que es tu manera de cuidar pero  esta noche serás sensato, tenemos invitados a los Duendes de las rimas y las prosas mañana viene Pilar, ….. la escritora que leemos, la más bellas de las plumas y sus reversos.  »