Barcos y Gemas (2016)

Ay madre que hermoso momento.

Nunca me han mostrado, todas las estrellas,

con las mismas manos, en el firmamento.

Estaban volando. No se estaban quietas.

Sus alas de plata cegaban tus ojos,

pero tú esperaste a que yo las viera,

teniendo sujetos,

todo aquel manojo de luces de seda prendido a tus ojos.

En las hojas quietas de todo tu otoño

cuantas cosas lindas descubro escondidas,

en el manto rojo.

¿Podré yo algún día ver los mil tesoros?

Seguro no caben en sólo una cueva,

llenarán las islas repletas de olas,

estarán atentas todas las palmeras.

Y yo con mis manos iré desnudando,

sigilosamente, las joyas que quedan.

Y si hubiera alguna que no descubriera,

con la luna llena, iré por la noche,

brillará la arena.

Abriré los cofres y seré el pirata que más gemas tenga.

Cargaré mi  barco, izaré las velas.

Irá amaneciendo, las aguas serenas,

y serán dos soles, que empujen la noche,

uno muy en lo alto, rodeado de nubes,

y otro que navega dejando una estela.”


URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS