Me gusta conocer las personas rotas.

Me gusta ver cómo se desnudan para el mundo,

Me gusta ver cómo aceptan sus vulnerabilidades,

Me gusta ver cómo brillan sus ojos de felicidad cuando hablan de haber superado una de sus miles de batallas,

Me gusta ver cómo le echan ganas a todo, aunque le hayan roto mil veces el corazón.

Las personas rotas están llenas de magia, llenas de coraje, y creo que no hay nada más precioso que conocer a una persona rota, pero con ganas de vivir.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS