Te espero sentado al filo de mis emociones, aquí te sigo guardando los sentimientos que engendraste en mí desde que nací; tanto buscarte ha hecho que me pierda por senderos “suicidantes”. Por lo tanto hoy te espero con un nuevo corazón, ahora en blanco y por siempre tuyo. Por el momento, recuérdame en tus sueños que yo te viviré en los míos. Te mando un beso en el aire, en lo que apareces y me llenas los labios de tus besos y tu nombre. Ansío darte la bienvenida, amada verdad que en tus labios estalla y todo llena. Aún no me conoces, pero me reconocerás en cuanto me veas. Mis manos tienen el tamaño exacto de las caricias que buscas y en tus ojos veré tu llegada tardía por tu espontánea rebeldía. Sigue creciendo, y llorando y añorándome; que eso sólo es momentáneo, nuestras cicatrices se borrarán con nuestro primer “te amo”. No habrá luz de luna que nos iluminé mejor que nuestras manos entrelazadas, ni sol que nos caliente más que el amar que nos mostremos. Te buscaba y me equivoqué… mejor te espero hasta que decidas llegar. TE AMO sin siquiera conocerte.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS