dueña de mi vida

Empiezo a entender cosas cuando me dejo sentir quien soy en ese momento. Y créeme que siento miedo al pensar que puede que en verdad no tenga nada claro en ese momento de dejarme ser, pero vale la pena mandar el miedo a la mierda y decirme a mi misma, si, me sigo sintiendo a pesar del miedo. Y sé que vale la pena porque en ese momento, piense lo que piense mi dolorosa cabeza, mi esencia se deja ser mi compañera del alma, se deja querer por mi, me dice si. Me digo si. Muchas veces me sorprende ver como la vida sigue con el tiempo pero sin mi, y luego es el mismo tiempo quien me dice que todo está bien está sin yo encima intentado agarrar aquello absurdo y lejano a mi. Es tras ese momento que me doy cuenta de que la vida me necesita y yo la necesito a ella, que me está pidiendo a toquecitos de atención que me exprese junto a ella, así que gracias por este gran comienzo dueña de mi vida, porque porfin sé lo que quiero hacer y lo haré, poco a poco.

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