DE LAS BARRIADAS (Poesía 2012-2021)

DE LAS BARRIADAS (Poesía 2012-2021)

Fran Nore

16/03/2021

DE LAS BARRIADAS (2012-2021)

FRAN NORE

CONTENIDO

• Soliloquio

• Barriadas

• Refréscate con el aliento de las hojas

• Jacarandas a la luna

• Navegación amorosa

• Desmemorias

• Crónica poética

• Destiempos

SOLILOQUIO

Soliloquio de alterado mundo

deseo encontrarte para desencadenar mi próxima cuita

y hablar conmigo mismo de mis infortunios

Me creerán loco pero loco enamorado

de la dulce vida sus sabores escojo

Mazmorras son los pensamientos que duelen

y los no dolientes pensares

son como aves olvidadas por el viento

BARRIADAS

Disuelta la calle en la noche pegajosa

Bullen algaradas de chicos prepotentes

emiten señales y signos comunicantes

con los que entienden sus tretas marañosas

Cruza el gatuno los tejados destechados

las vigas empinadas

los cobertores con alambres donde penden ropas desgastadas

y mujerucas despeinadas atiborradas alrededor de un chisme

Cruzo las barriadas al paso del perseguido desenfreno

REFRÉSCATE CON EL ALIENTO DE LAS HOJAS

Refréscate con el aliento de las hojas

y muda la piel del otoño de mi país imaginario

Es hora de perfumar las horas de los cuerpos

Los instantes de las almas

Múdate sin equipajes estorbosos a esta laguna de bosques equipados

Te espera el dactílope la acacia rasgada el orejudo sapo dorado

La cigarra altisonante las agudas y graves jacarosas de rosa en rosa

Te espera el ocaso y sus descorridos telones de espectáculo

JACARANDAS A LA LUNA

El gualanday o jacaranda
Es alto y rosado
a la luz de la luna luna
como un pájaro enredado

Oh golondrina del suplicio
vuela en los días sin sueño
Salmodia trinos
entonados en un misterioso grito

Si sufres bajo la sombra
Acércate a la cruz de tu brillo
al sol de tu despertar
los instantes de recogimiento

Gracias por estar conmigo
en los angustiosos lapsos de hastío
Cuando la música frenó sus silbidos
interludio del solitario ventrílocuo

Escritura interior del eco
Lenguaje de la sed consumada
Clama la sangre de la noche
Las entrañas de las sombras

Cantantes jacarandas
a la luna entibiada
Las altivas ramas forman laberintos
entrecruzados entre los cráteres del cielo

NAVEGACIÓN AMOROSA

El dulce mal

La mujer de sal

Andrés Eloy Blanco

Viaja sola por el mundo mientras en la distancia

brilla un velo azul flotante

y el amanecer la baña con su claridad más nítida

y sus lágrimas de cristal

Me siento un náufrago sin realidad

Es mi vida un laberíntico mapa de trochas secretas

y de extrañas interjecciones en mi memoria

que me retiene con su aliento hecho de tiempo

Al instante apareces como una luna loca

en la alteridad del recuerdo que dibujan mis palabras

mientras ausente contemplo el libro de tu vida

Y tú quién sabe dónde andarás robando miradas y sonrisas

Mis emociones me persiguen mustias y calladas

dejando huellas en la arena efímera

Y en la lejanía las olas del mar se acarician solitarias

Melancólico canto onomatopeyas de amor furtivo

Sólo hasta hoy entendí los ayeres que ya no están

Y las palabras ambiguas de las noches felices

Sólo hasta hoy siento el viento de mis ilusiones vagas

revoloteando con las esfinges de mis sueños rotos

Y tú viajando sola por el mundo

mientras tu silueta bella pero inverosímil

se alimenta de viejas alegrías

de cantos y de odas tu libélula ninfómana de deseos

Caleidoscópica filigrana de ortografía inocente

Epígrafe de mi travieso niño hecho en la arena

La mariposa de la ausencia se deposita en mis ojos

me cautiva cuando me cuesta mirar el tiritar de los días

DESMEMORIAS

1

recuerdo atestado de imágenes

el tiempo muerto

lento

escarlata

navega

hasta el precipicio

pierde su delgadez

Me extravío en las profundidades no hay luces ni resquicios

Sólo ecos

2

se transforma todo cuando ya no estás

Si estás es igual la herida

en el costado

No estoy en ninguna parte

Tal vez me encuentres en un sueño

donde digo un mudo adiós

3

Finaliza la tarde en la ciudad

en los caminos

en las calles desaforadas

Resurge de nuevo al otro día iluminada por la asfixia de los trajines

busco lentamente las ramas del árbol de la tarde

con mi acuosa mirada

Está en las flores

la tarde

cantando tonadas

4

capullos de seda trae la brisa feliz

La memoria hiere

mi naufragio

su nostalgia truncada

5

Deliciosos néctares embriagan mi sed de dicha extrema

se depositan en mis resecos labios

Saborean mis revolcados sentidos

ansiosas caricias me perturban en estas extrañas horas

6

Tu maravillosa presencia

huele a sidras y a hojas de acanto a raíz de berenjenas

Tal vez hueles a yerbabuena

o a carmín tu plumaje de hada madrina

tu mano alargada

Tu tembladera

Tu mirada ya pensada

tu sensual propuesta

antes de escribir este poema

7

rebeldes nubes te llevan

hasta el fondo de los ensueños

duerme y sueña

Con salamandras ígneas en tu pelo

Con ramillete de flores silvestres

recorre planetas y soles sin medida

Simplemente sueña con alegría mientras flotas

8

Al amanecer naufrago demasiado mi memoria es un cofre donde guardo secretos

Mi aliento está hecho de tiempo

de palabras ausentes

Mis emociones me dejaron profundas huellas

soledumbre se llaman mis días y noches

canto los ayeres furtivos

Mi presente es tan árido

Como viajar solo por el mundo

9

te escribo

te quiero

afuera la lluvia tan solitaria

llega como música de la noche

entre los filamentos del viento sonoro

10

el viento es el fabuloso amante de las hojas de los árboles

atrapa las cataratas de agua en los peñascos

los páramos de insondables lejanías

el vuelo de las gaviotas en las costas marítimas

CRÓNICA POÉTICA

Camino al son del viento emancipador

Las calles son más largas cuando no sonrío

y extrañas bocas pronuncian mi nombre

¿Seré el hombre que llaman entre las verjas?

No sé si merezco que una sombra me llame por mi nombre

igual no me importa demasiado

Y camino sin sonreír con mis labios de tierra

con mis ojos llameantes de fuego apasionado

con mi cara de hueso salpicado de brisa

Hace una pequeña luna verde

y cae la suave escarcha

sobre los guayacanes nocturnos deshojados

Se sacuden las hojas de los árboles

en el frío de la ausencia

insaciable sed

La noche es cómplice de mis manos deshojadas

mis pies transitan levemente

un camino imaginario de patria recién nacida

Antiguos íconos de mi vida descubierta

relucen juveniles en un campanario perpetuo

exhalo subterfugios

El horizonte funda en mis ojos

parajes lejanos

Quiero renacer allí como una llamarada

No busco nada

Tengo en mí todo lo que soy

Tengo en mí todo lo que quiero

Ya me equivoqué las veces que quise

aceptando aprender a verme

al punto de borrar los dolorosos recuerdos de mi mente

DESTIEMPOS

1

Por tu cuerpo manan mis besos

como deliciosos néctares recorren tu piel

Refresca mi sed de amante desvariado

La seductora succión me extasía

embriagándome de dicha extrema

se excita de inmediato mi corazón a la reacción

Desencadenada tu desnudez se deposita en mis brazos

caricias de seda que ansiosas me perturban

Tu presencia maravillosa y perfumada

saborea mis revolcados sentidos

Y hueles a azaleas y a rosas de campos plenos

aroma exquisito del amanecer

olor de las hojas de acanto al viento

de las sutiles raíces de las berenjenas

Tal vez hueles a yerbabuena

o a carmín tu vulva excitada

he de socorrerte con mi abrigo de oso felpudo

ahora que tu plumaje de cisne me acoge con dulzura inusitada

Mi lengua vistosa y rosada moja tu epidermis

tu indefensión y tembladera

2

rebelde con tus nubes amarillas

te llevan fondos de cristal amoroso

Hasta tu ventana de canciones del verano

libre y sonriente

recorres alegres estaciones de la ordinaria vida

Te ves siempre en los recuerdos de tu mente

Como si buscaras tu salvadora fuente de luz

La propia sombra de tus miedos

corriendo por pasillos que desconoce tu voz

El impresionante encuentro contigo misma

te permite ver humedales inmóviles

cuchillas escarpadas en una bruma color neutro

El vacío embotellado y cálido

una sombra no hace la luz

el destino viste extrañas pelmazas

si te reconoces en la que eres

3

He descubierto que las calles son más largas cuando no sonríes

y retorcidas bocas pronuncian nuestros nombres

¿Seremos los amantes que llaman entre las verjas?

No sé si merecemos que las sombras nos llamen

Igual no me importa demasiado

Y caminamos sonrientes con nuestros labios de tierra

con nuestros ojos de fuego apasionado

mientras una luna verde cae con la suave escarcha

sobre los guayacanes nocturnos deshojados

Se sacuden las hojas de los árboles

en el frío de la ausencia

su insaciable sed

La noche se ha hecho cómplice

de nuestras manos florecidas

Nuestros pies transitan levemente

descubiertos caminos imaginarios

somos miembros de un perpetuo campanario

Y exhalamos subterfugios

El horizonte funda en nuestros ojos

Parajes lejanos

Quiero renacer allí

A tu lado

Al igual que el guayacán amarillo en las tardes

florea al sol

su llamarada

4

Viajas sola por el mundo mientras en la distancia

brilla un velo azul flotante

Y el amanecer te baña con su claridad más nítida

y sus lágrimas de cristal

Me siento un náufrago sin realidad o demasiada

Es mi vida un laberíntico mapa de caminos secretos

y de extrañas interjecciones en mi memoria

que me retiene con su aliento hecho de tiempo

Al instante apareces como una luna loca

en la alteridad del recuerdo que dibujan mis palabras

mientras ausente contemplo el libro de tu vida

Y tú quién sabe dónde andarás robando sonrisas

Mis emociones me persiguen mustias y calladas

dejando huellas en la arena efímera

Y en la lejanía las olas del mar se acarician solitarias

Melancólico y atribulado canto onomatopeyas de amor furtivo

Sólo hasta hoy entendí los ayeres que ya no están

y las palabras ambiguas de las noches felices

Sólo hasta hoy siento el viento de mis ilusiones vagas

revoloteando con las esfinges de mis sueños tormentosos

Y tú viajando sola por el mundo

mientras tu silueta inverosímil

se alimenta de viejas esperanzas y alegrías

de cantos y de odas tu libélula ninfómana de deseos

Caleidoscópica filigrana de ortografía inocente

Epígrafe de mi travieso niño hecho en la arena

La mariposa del ensueño se deposita en mis ojos

me cautiva cuando me cuesta mirar el tiritar de los días

5

Perezosa pera

muerdo

Su olor acandí

acuarimántima salmuera

su éxtasis oro

higos en pliegues olorosos

cosecha próvida

Alucinado deambulo

en el hilo de la luna

habito su casa construida de selenitas desfragmentadas

Por los meteoros que brincan

En las coordenadas del espacio-tiempo perdido.

Será posible en el futuro

la primavera celeste

el rayo tractor del amor

6

tu cuerpo

Placentera galería

Colmada de imágenes

7

A lo lejos nuestra casa

Habitada y deshabitada a la vez

¿dónde vivimos?

¿en una fotografía del recuerdo?

Ha muerto el tiempo en nuestra casa

Lo que queda de vida es un espejismo muerto

Aunque aún leo ternura en tus ojos escarlatas

8

Florece solitario en la pradera

El Señor Viento y sus ecos

Me arriesgo a perseguir por sendas neblinosas una brizna hasta el precipicio

que asoma su delgada visibilidad en la noche

Me extravío entre los ecos del Señor Viento

Exclamo las voces de mis ecos

9

los corazones heridos

mueren en el costado del camino

Mientras pasan heridas las horas

regreso de una galaxia perdida

Me siento un animal hipnótico gravitando en mí mismo

Entre la tierra y la soledad de la luna

La poesía con sus voces humanas

10

Agridulce memoria que hieres

Te exijo la devolución de las cartas

Porque nuestro naufragio no puede ser estudiado ni leído

Y sólo nos pertenece su nostalgia terrícola

Su trazo de olvido

Me pregunto con afán por llegar

a qué destino llegaré

a qué extraño lugar

Los campos de la soledad con flores y guitarras a unísono

emitiendo las señales del canto de los días

11

Tu belleza de diosa desgarrada

En los altares de las vírgenes veredales

No hay verdad que opaque la belleza

La belleza ya es una verdad

12

El ritmo esencial de lo divino

su voz e imagen son espejo

Donde se reflejan los poemas

De las flores y del vino

Etiquetas: poesía

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