11 de septiembre de 2003, Beatriz y Ángel contrajeron nupcias entre un gran banquete elegante celebraron la ceremonia, todo era felicidad, al término de la fiesta los novios se despidieron de familiares y amigos, subieron al auto y partieron hacia el aeropuerto. Su destino a la luna de miel era una hermosa playa, en ese viaje comenzaría el infierno de Beatriz, el vuelo duró poco más de 12 horas. Al llegar al hotel,

-Al fin estamos solos- dijo Ángel mientras tomada de la cintura a su esposa

-Estoy agotada- respondió ella, un poco incómoda. No conforme con esto Ángel molesto le jalo el cabello a Beatriz y le mordió los labios.

-Me estás lastimando- dijo casi al borde las lágrimas. Ángel la aventó a la cama y comenzó a desnudarla, ella se oponía pues después de lo sucedido se sentía mal, pero a él no le importó y terminó por obligarla a tener relaciones sexuales con él.

Al día siguiente, Betty se despertó y se metió a bañar, al salir comenzó a empacar sus cosas, en ese instante entró Ángel.

-¿Que estás haciendo?- dijo él alzando la voz

-Después de lo de anoche ya no me siento cómoda aquí-

-No vas a ningún lado, aquí estaremos el tiempo que dijimos-

Al intentar salir él la jalo del cabello y comenzó a golpearla. Salió enojado de la habitación y se dirigió a un bar, en ese momento sonó el celular de Betty, era una llamada de su madre:

Betty: ¡Hola mamá!, ¿Cómo estás?

Mamá: Hola hija, estoy bien y ¿Tú?

Betty: (Nerviosa) Bi…Bien.

Mamá: ¿Segura?, No te escuchas muy convencida.

En ese momento escucho que alguien se acercaba a la puerta y colgó. Su madre desconcertada intentó llamarle varias veces más pero ella apagó el celular.

-¡En este mismo momento nos vamos a casa!- dijo Ángel en tono molesto.

-Dijiste que nos iríamos hasta que terminara la Luna de Miel- dijo ella sollozando.

-No importa lo que haya dicho nos vamos de aquí y fin de la discusión-.

Empacaron sus cosas y salieron rápidamente del hotel, abordaron un taxi y en el camino Beatriz iba muy pensativa,

-¿Que tienes?, ¿Porque tan pensativa?- le decía Ángel mientras le daba palmadas en el brazo. Reaccionó y le dijo -Solo me siento un poco mal-. Llegaron a su casa y ella de inmediato se recostó, pensaba en que había hecho mal al no comentarle nada a su madre. Pasaron dos meses y Beatriz había cambiado mucho ya no convivía con su familia, había cambiado su forma de vestir y había dejado de trabajar porque Ángel así se lo había pedido. Unos días después de haber renunciado ella comenzó a sentirse mal, y a escondidas de su esposo fue al médico.

-Sra. González ya tengo los resultados de sus análisis- dijo el doctor contento,

-¿Que tengo doctor?- respondió ella algo preocupada.

-¡Felicidades señora está embarazada!- sonrió.

En el camino iba pensando cómo le daría la noticia a su esposo, así que le preparó una cena, pasaron horas y él no llegó. Se dirigió a su habitación, se desmaquillo y se puso su pijama. Esa noche Ángel estaba con sus amigos y apagó el celular. Betty no podía dormir de la angustia que tenía porque él no llegaba, así que intento llamarle pero no logró resultado, cerca de las 4 AM llegó.

-¿Dónde estabas?, Me tenías preocupada- dijo

– Que te importa- dijo él balbuceando

-Debo darte una buena noticia mi amor-

-¿Que noticia?-

-Estoy embarazada- dijo ella sonriendo

-¡¿Qué?!, ¡Esto no puede ser!- dijo él alterado

-¿No te da gusto?- dijo con la voz entrecortada

– A lo mejor no es mío- dijo molesto, al mismo tiempo que aventaba cuánta cosa tenía a la mano.

-Claro que es tu hijo- respondió ella

– Obviamente no, yo trabajo todo el día- se acercó y la tomó del brazo.

-¡Por favor no me vayas a golpear!, Te lo suplico- dijo Beatriz llorando.

-¡Cállate!-

-¡Por favor!, Piensa en el bebé-.

La aventó contra el suelo y comenzó a golpearla, ella le suplicaba que se detuviera pero hizo caso omiso y continuó hasta que ella dejó de moverse. Tomó las llaves del auto y salió de la casa. Por la mañana la madre de Beatriz, decidió acudir a la casa para saber cómo estaba su hija, tocó la puerta sin resultado. En ese instante se dio cuenta una vecina la cuál le platicó lo que había escuchado en la madrugada y lo que había estado sucediendo desde que ellos habían llegado al vecindario, por lo que decidieron forzar la chapa, al entrar la señora se dio cuenta de todo el desorden que había en la casa, al entrar a la habitación encontraron a Betty inconsciente, al menos así lo pensaban, inmediatamente su madre le pidió a la vecina llamara a una ambulancia.

Al llegar los paramédicos, hicieron el chequeo correspondiente y uno de ellos llamó a la policía y al servicio forense, pues Beatriz ya no contaba con signos vitales. La madre al enterarse de eso se derrumbó y comenzó a llorar. Un par de minutos después arribaron los policías y el servicio forense procedió a llevarse el cuerpo. La vecina dijo que había sido testigo de las discusiones que tenían ella y su esposo, pues los gritos se escuchaban hasta la calle, también declaró que varias veces ella llamó a emergencias y que hicieron caso omiso al pedido de ayuda. En la necropsia realizada a Betty determinaron que había muerto a causa de fractura de cráneo, derivado de las patadas recibidas en la cabeza, entre otras causas dadas por los golpes que le dio su marido, además, de que le informaron a la familia que ella estaba embarazada.

Familiares y amigos de Beatriz, se reunieron para darle el último adiós, todos se cuestionaban por qué ella nunca pidió ayuda, de haber hablado a tiempo las cosas hubiesen sido diferentes, pero decidió callar, ¿Por qué? Tal vez ella pensaba que Ángel cambiaría con la llegada del bebé, tal vez por miedo a que su marido le hiciera un daño más grave. Lo lamentable fue que su silencio la llevo a sufrir la peor de la consecuencias, la muerte. De Ángel, se sabe que fue detenido y sentenciado a 30 años de prisión por feminicidio, la madre de Beatriz lo denunció unos días después del funeral de su hija, estaba a punto de salir del país cuándo fue capturado. Se hicieron las debidas investigación y encontraron las pruebas suficientes para declararlo culpable.

Nunca entenderán que llevó a Ángel a tratar de esa manera a su esposa y decidir quitarle la vida a ella y a su hijo, sin motivos congruentes la golpeaba sin piedad, sin motivos la había obligado a alejarse de su familia y amigos, sin motivos la hizo cambiar su manera de vestir.

Han pasado 6 meses de la muerte de Beatriz, su madre se le ha ocurrido investigar en internet acerca de la violencia doméstica, entre los resultados de búsqueda encontró una grupo llamado “Mujeres Puños Violeta” la cual se dedica a brindar información y orientación a mujeres víctimas de violencia de cualquier tipo. Han concretado una cita con la directora de dicha fundación, ya que, ella está muy interesada en contar el testimonio de su hija, dar orientación a las mujeres para que denuncien sin miedo a nada, para que no pasen por lo que pasó su hija. Porque sin motivos su marido le quitó la vida. La madre de Beatriz junto con un grupo de mujeres, van a escuelas, oficinas y parques a dar conferencias, la señora aún se le hace un nudo en la garganta al contar la historia trágica de su hija, pero le da gusto el poder orientar a otras chicas para que huyan de un ambiente violento antes que sea muy, muy tarde y que sin motivos…. Acaben con sus vidas.

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