Cupido enamorado

Por ti incumplí órdenes, ¿y cómo no hacerlo? si eres belleza para mis ojos, y delirio para mi alma, temía y me achacaba, tenía encima de mí un acto que debía obedecer.
¿Pero cómo obedecer algo que le hacía daño a mi corazón? era un amor furtivo, besos furtivos y sensaciones genuinas.
Que grata compañía me hacías sentir, yo era un dios puro y angelical bajo a las órdenes de mi bella y poderosa madre las desobedecí, eres amor sincero, eres mirada delirante; eres encanto puro, debo decir que te idolatro, y admiro la osadía de tu amor.
¡Oh Mi amor, oh mi psique estoy atontado dentro de tu alma!
Bendito y sano amor que me ha hecho delirar y requebrar todos tus atributos, eres fantasía real, eres mi estrella fugaz, eres mi sol del mar, eres mi más sensación flotante para lo banal. No hay ni arco ni flecha para esto que es real.

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