Alguien me dijo una vez que, «El amor solo, a veces no es suficiente». Fue una frase que me marcó y se me cicatrizó en el interior de mi desgastado corazón. Le di vueltas a aquella frase día y noche de hecho saqué en conclusión que, no es que el amor no sea suficiente, es que no hay suficiente amor. 

Y yo me pregunto ¿Y que haces cuando no hay suficiente amor? La respuesta es nada. No puedes luchar contra el «tic tac» de un final qué con el tiempo se convertirá en un principio.

Limitate a esperar a que todo vuelva a estar en su sitio, costará caminar, soñar, reír, recordar… pero ese «tic tac» que avecina discordia será en un futuro tu cura.

Disfruta el momento mientras lo vives, llora cuando lo necesites y ríe todo lo que puedas, que la tristeza aparece cuando menos te lo esperas.

Recuerda esto, el amor es suficiente para luchar por lo que quieres, no necesitas nada más.

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