KRIPTON 

Supermán, de tu planeta cayó un trocito, verdes sus ojos, un rincón quiero en su corazoncito. No creía en tus poderes hasta ver su mirada, sin ella, nada tiene sentido ni vale la vida nada. Muchos juegan a la ONCE, yo quiero entregarme a su juego, apagar mi llanto con su fuego, despertar a su lado de madrugada y que posea mi vida alquilada. Firmarle un contrato de arrendamiento, disfrutar juntos cada momento y que sea la dueña de mis sentimientos. Que de por vida tenga mi alma en usufructo, que cuando muera herede mi corazón, pueda enfrentarse al camino más abrupto y nunca desaparezca de su razón. Que las mareas bajen cuando ella pase, el sol reluzca en su presencia, que del Tajo hagan el trasvase y no sufra nunca mi ausencia. Que sienta siempre mi compañía, sea feliz noche y día, sea por mi aura acariciada y note su piel por mi almibarada. Supermán, te pido como si fueras el genio de la lámpara maravillosa, deja todo lo que estés haciendo y dedícate únicamente a tal cosa.

Angel Márquez Díaz

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