El tiempo se puede definir sin limitantes y el nombre que yo le he puesto al tiempo es tu nombre por que cuando pienso en ti mi alma se tranquiliza.

Al mirar cómo pasan las nubes me recuerda lo rápido que puede pasar la vida en un momento muy corto y con mucha ironía ya que los recuerdos te invaden de cosas que te tocan el corazón y estoy segura que puedes contar esos suceso importantes no enfocado en la  edad de  años  vividos si no por la importancia  de lo que pasa, estando acostada en el  césped la pereidolia  me invadió y es increíble de lo que la mente  quiere formar aunque literalmente no este la imagen, es curioso formar letras y la primera letra que supuse que era  pues… obviamente era la  inicial de tu nombre. y fue el momento en que suspire. 

He aprendido que las emociones no se malgastan por ello he decido aceptar todo lo que venga a mi vida desde el momento que te fuiste y solo ocupar mis emociones en ti. 

El día que estaba mirando la nubes fue por que misteriosamente  coloque una alarma el año pasado por una conversación que mágicamente creí que podría ser cierta  y la verdad es que talvez soñé demasiado estando despierta.

Los sueños nos impulsan a estar una burbuja de esperanza y de valentía pero el día que te das cuenta que ese sueño tan deseado no pasara es el momento de tener los pies en la tierra y pedir piadosamente a la madre naturaleza que nos acoja, nos llene de aire fresco, nos inunda del color verde y nos inspire a seguir adelante.

Dedicarte cada noche no es sencillo pero es el deber de amar.

ATT. Jazmín 

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