La lucha constante contra los más bajos instintos, los traumas familiares y las enfermedades mentales. En definitiva, la lucha incansable por alcanzar la felicidad
Estaba un poco loca mi madre. Se ponía tan fiera cuando se trataba de amar, que parecía un volcán. Tenía delicadeza mi madre. Nunca contaba los episodios que la incluían. Podía haber abierto la almidonada boca, y todos hubieran festejado su talento. Pero no lo hizo. La modestia, esa seguridad interna de su propio valor,...