Pensé mientras el coche se lanzaba contra el muro.

La cara que pondría mi señora al verme convertido en puré en el asiento de mi carro.

Los ojos llorosos de mis hijos. Preguntándose porqué el coche quedó convertido en mierda.

-Pensé saltar en el último segundo antes del impacto. El cinturón de seguridad no quiso.

Desde arriba miré por última vez mi cuerpo y mi cara de angustia y terror.

-Mierda, hubiese sido mejor no viajar hoy. Si el freno hubiera funcionado.

-Si el camión hubiera virado para el otro lado.

Diablos tantas conjeturas para un solo fin.

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