En la penumbra de un día silencioso
veo tu rostro en el cielo
el pensar que tu corazón ardiente y puro
mi rostro siente la brisa del viento
que estremece con el frio mi cuerpo
Siente mi cuerpo tus caricias con tus manos suaves
Con el olor de tu esencia, tus labios rojos carmesí
Siento que me besas con un solo propósito
Amarme a mí, solo a mí, para toda la eternidad
Gracias por dar este amor tan inmenso
Gracias por tener tu rostro en mi hombro
Gracias porque sin esperar nada te tengo entre mis brazos
Si te vas por favor recuerda dos palabras sinceras “Te amo”.
Alexis Zamora
Escritor
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