Veintiuno

Ayer, mientras mi mami dormía, hice una travesura.

Tomé las llaves que deja, cuando descansa, sobre su mesita de noche, y me salí de la casa.

Solo fui a la tiendita de Don Chuy, esa que está en la esquina. Le pedí que me fiara una dona de chocolate, para comerla con mi vaso de leche.

Mientras esperaba, escuché, por su radio, una canción de un señor Alberto Cortez, creo, que no entendí. Decía algo así como “Cuando le dije a mi padre que me iba echar a volar” ¿cómo puede uno echarse a volar? pensé. Al menos yo no puedo, no todavía. Luego seguía “Que ya tenía mis alas y abandonaba el hogar”, si yo tuviera alas, no me gustaría abandonar mi hogar, Las utilizaría para recorrer tantas montañas y bosques que me encantan. Pero lo más extraño fue que luego decía “Se puso serio y me dijo, a mi me ha pasado igual, también me fui de la casa, cuando tenía tu edad” ¿o sea que él también había abandonado a sus papás? Que extraño.

Seguí escuchando la canción que decía “En cuanto llama la vida, los hijos siempre se van” que bueno que a mi nunca me ha llamado, pensé, para que no tenga que irme, o al menos nunca la he escuchado. Pero lo más extraño era que seguía “ Te está llamando el camino y no le gusta esperar” ¿será que el camino se canse de esperar y se vaya a otra parte? La verdad no entiendo nada.

Seguí escuchando muy atento, a ver si lograba entender algo, pero al contrario, cada vez entendía menos, pues continuaba diciendo “Camina siempre adelante” ¿es que se puede caminar para atrás? Yo, al menos, no puedo. “Tirando bien de la rienda” ahora si de plano me perdí por completo ¿de que rienda me habla? Solo que se refiera a que hace falta una rienda para que me saquen jalando de mi casa. Sí, eso debe ser. “Mas nunca ofendas a nadie” ¿por qué habría yo de ofender a alguien? “Para que nadie te ofenda” ¿eso será a lo que le dicen “ojo por ojo”?

En fin, mejor ya no quise seguir escuchando y salí corriendo, con mi dona de chocolate, de regreso a mi casa, antes de que mi mami se despertara y notara que me había salido sin su permiso.

Mientras me comía mi dona, estuve pensando en la canción, y me pregunté si a mi papi le habrían salido alas cuando yo nací, y por eso tuvo que irse de la casa.

Yo no entiendo nada. El otro día que vino mi tía Gloria a tomarse un café con mi mami, las escuché decir que mi papi no había soportado que yo tuviera un cromosoma de más y por eso se había ido, Nunca pensé que el tener algo de más, fuera un problema,

Desde entonces me pregunto; ¿habrà alguien que me ayude a quitarme ese cromosoma para que así mi papi regrese?

…