EL BESO DE MI TIO
Llegábamos al sur de Chile, como todas las vacaciones de verano, a posar en la casa de mis abuelos. Ellos dirigían una pequeña iglesia, y junto a ella tenían su casa. Llegamos, y mi madre estaba contenta de que nos encontráramos con mis abuelos y con mi tío Beto. Beto no tenía casa, así que...