Simplemente yo.

Mi nacimiento ocurrió un día sábado, muy lluvioso, y que podía esperarse, era invierno, por lo que es normal que cada cumpleaños llueva.

Mi madre me amó desde el primer momento, mi padre, dice que sí, pero no estoy segura, no es como que lo haya demostrado a lo largo de mi vida, según mamá, él me ama a su manera, pero bueno, ¿qué puedo hacer yo? Es la vida que me ha tocado, y soy feliz con ella, tengo una madre muy amorosa, es mi mejor amiga, además, mi familia es muy cálida, no tengo hermanos así que he podido gozar perfectamente la vida de un hijo único, es simplemente maravilloso, digo, la atención de mi mamá es solo para mí, suena egoísta, pero son los pensamientos que se adquieren con el tiempo al llevar tanto siendo hija única.

Aunque, de pequeña siempre deseé poder tener un hermanito, obviamente jamás sucedió. Algunas noches, recuerdo pedirle a mi mamá leerme aquellos relatos que tanto amaba, teníamos un fantástico libro llamado “Relatos Extraordinarios-Edgar Allan Poe”, de ahí viene mi gusto por tan maravilloso escritor.

Crecí en una familia con amplio gusto por la lectura, así que no es de extrañar que mi más grande sueño sea publicar un libro, ahora, a mis 17 años estoy trabajando en ello.

La familia, es sin duda lo mejor de una persona, a veces no son lazos sanguíneos, si no emocionales, a veces la familia se encuentra en amigos, porque, ¿qué sería de alguien sin su familia? La verdad no lo sé, y espero no saberlo nunca, es decir, mi familia es mi parte favorita de esta vida, quizás en la siguiente me toque una igual de maravillosa, aunque a la que ahora poseo es difícil de superar, sinceramente, digo, son la mejor.

Pero mi favorita, sin dudarlo ni un segundo, es mi madre, ella es lo mejor que tengo en esta vida, es mi confidente, sé que puedo contarle lo que sea y jamás va a juzgarme o fallarme, es un ser humano maravilloso, no sabría qué hacer si ella no estuviera conmigo, sinceramente. Ella hizo que tuviera una infancia perfecta, y hace que actualmente mi vida siga igual, sin grandes lujos, pero me da todo lo que podría desear.

A mi madre, siempre le agradeceré por todo lo que ha hecho por mí, por el apoyo incondicional que siempre me ha dado, sin contar todas las que me ha aguantado, no hay mujer como ella, pues para mi es única, y si me dieran la oportunidad de nacer nuevamente y escoger a mi progenitora, ella sería nuevamente la elegida sin duda.

Bien, no sé qué más escribir, ni siquiera si lo que logré plasmar está bien, pero fue lo que de salió de mi corazón, sin pensarlo, pues de eso debe tratar cuando se escribe sobre la familia, no hay que pensar sobre las palabras que saldrán, sino escuchar lo que dice nuestro corazón.