Hoy Carla me ha vuelto a preguntar por mis planes. Un «¿te vas?» con café impregnado de pesar, mientras yo me quemaba de impaciencia al intentar tomar mi líquido oscuro sin dejar pasar suficiente tiempo. He tenido que contar de nuevo -lo he hecho veinte veces ya- que no sé qué voy a hacer todavía. «Quiero irme». Estoy esperando que pasen cosas que me permitan tomar una decisión. No sé, quizás me toca dejar de esperar esas cosas, dar rienda suelta a mi característica impaciencia. Quemarme. Play.
OPINIONES Y COMENTARIOS