Edit.

Edit… (18 de octubre 2016.)

Estoy secuestrada por un verdadero monstruo, por favor os lo pido, no enviéis ningún comentario porque no sé si puede que le lleguen al correo, y supondría otra paliza o algo peor.

De mis quince años de vida, lo mejor son los años que no recuerdo, que no lo recuerdo a él… Desde que tengo memoria he sido machacada y maltratada sin que mi madre pudiese levantar la voz o decir nada en su contra, porque a ella también la trata mal; peor que a mí.

Somos tres hermanos; yo la pequeña, pero los otros realmente parece que crean que yo me merezca los golpes. Porque para ellos una chica no merece pasarlo bien. No merece enseñar lo bonito que tiene en ella, aunque mis piernas sean preciosas. Ahora no las enseñaría porque tengo un moratón grandísimo aquí en el muslo y en la pantorrilla.

Ni se me ocurre pedirle si puedo ir a bañarme con las otras amigas. Les digo siempre que tengo mucho que estudiar. Tampoco creo que fuese, pues andan todas con móviles y les dan paga, a mí me dan palizas y cosas peores… Tengo que dejaros, vuelve del bar…

Edit… (21 de octubre de 2016.)

Me siento una mierda, y me siento sucia. Por mucho que me lave no se quita esta mierda de dentro. Es un cabrón, y es un cerdo. Mi madre lo sabe, y mis hermanos lo saben. Yo por ellos lo haría. Son fuertes y no entiendo el porqué no dicen nada. Le tienen tanto miedo como yo. A ellos les va bien así y no quieren verlo. Parece que lo adoren.

Me gusta escribir. Daría lo que fuese por poder escribir aunque solo fuese en el móvil, y no en su portátil. Estaría tecleando notitas constantemente, porque se me ocurren muchas cosas bellas cuando veo algo. Para los demás son lo de siempre, pero para mí, cada cosa es un mundo nuevo. Imagino a un pájaro escapando de la jaula, y que cada cosa que ve es algo nuevo, y ve colores que los demás no aprecian.

No puedo sacarme sus manos de encima aunque me lave las veces que me lave. Sé que podría llamar al 016, que no sale en la factura, y esas cosas. Pero me reboté un día y le dije que lo iba a denunciar, y me pegó un bofetón que me tiró sobre el mesado. No recuerdo nada más que despertarme en la cama. Me dolía todo el cuerpo como si me hubiese seguido pegando después en el suelo. Mi madre no tuvo ni el valor de llevarme al médico; tampoco tiene el carnet, y no la dejaría. Creo que no sabe que para mí la fuerza con la que me golpea me provoca más dolor que cuando aquel coche se saltó el paso de peatones y me llevó por delante con la bicicleta, y golpeé la cabeza contra el asfalto. Era muy pequeñita y creí que mi padre había cambiado… ya viene.

Edit… (21 de octubre de 2016.)

Como decía, en el hospital hablaba con una educación y una sumisión que realmente creí que había pasado algo grave y había cambiado mucho. Pero después me di cuenta que no, que delante de la gente no era capaz de negar, o de contradecir a nadie, no había cambiado. Ni mucho menos. Era educado, con buenas palabras y tenía a todo el mundo engañado. Recuerdo que mi madre me miraba, en aquellos casos, y en su mirada veía que yo había descubierto cómo iba el juego, y que comprendía como era posible que ella se hubiese casado con un cerdo como mi padre.

Hoy es el peor de los días, los viernes empieza el fin de semana para él, pero para nosotras empieza el infierno, porque a ellos les deja hacer lo que quieren, pero yo me acuesto y no puedo dormir hasta que se mete abajo en la habitación, porque si sube no puedo evitar empezar a llorar, y hasta creo que desde aquí huelo la peste a alcohol que se mete por la nariz y por la boca, y parece que me emborracha. No pienso beber nunca en mi vida… Dios, viene, xao. xoxo.

Edit… (25 de octubre de 2016.)

He conocido a un chico que parece majo. A lo mejor no es como parece, pero en clase me hace reír aunque trato de pasar de él. Insistió en acompañarme a casa y entre las bromas llegamos hablando hasta cerca de dos manzanas. Es muy guapo y creooooo..o .,m hjsk´abhs………. .. . .